En la actualidad cerca del 20% de la población albacetense es mayor de 65 años. Pero la realidad es que ese crecimiento exponencial de este grupo de población hará que en 2030 las personas mayores representen el 25% de la población, y superará el 30% en 2050. Sin embargo, son el colectivo que más estancias hospitalarias genera. «La mitad del total de estancias hospitalarias se deben a personas mayores de 65 años», según afirmó el jefe del Servicio de Geriatría del Complejo Hospitalario Universitario durante la inauguración de la Semana Nacional del Envejecimiento Saludable que se celebra en la ciudad como complemento a la IX Reunión Nacional de la Sociedad de Medicina Geriátrica que acoge la ciudad entre los días 31 de este mes y 2 de abril, y que convertirá a Albacete en el epicentro del debate de las políticas y programas sanitarios dirigidos a este colectivo.
Por ello, en opinión del doctor Abizanda se hace imprescindible que los gestores y promotores de políticas sanitarias sean conscientes que las personas mayores son ya los principales usuarios del Sistema Nacional de Salud. «Todos los dispositivos sanitarios deberían ajustarse a las necesidades que tienen las personas mayores», algo que ya la Medicina Geriátrica ha tenido en cuenta como especialidad que se dedica al abordaje de las patologías de este colectivo, pero que debería hacerse extensible a otros muchos los servicios y áreas en el ámbito hospitalario donde también ingresan las personas mayores «y por tanto deben adaptarse a esta realidad», aseguró el jefe del Servicio de Geriatría que dijo «el hospital debe convertirse en un centro amable con las personas mayores, creando comisiones y estructuras en las que participen este colectivo de personas, mejorando la accesibilidad, la adaptación de espacios y recursos, etc.»
Uno de los proyectos que arrancó con la pandemia del coronavirus y que se ha convertido en un recurso altamente eficaz, son los equipos de continuidad asistencial en residencias, que están integrados por siete geriatras (dos a tiempo completo y cinco a tiempo parcial y cuatro enfermeras especialistas en Geriatría (dos de ellas a tiempo completo y dos parcial), que todas las semanas se desplazan a todas las residencias de la provincia de Albacete, evitando así que las personas mayores institucionalizadas tengan que salir del medio residencia para ir a consultas hospitalarias, que el manejo siempre que se pueda sea en los centros sociosanitarios, reduciendo los ingresos hospitalarios y las visitas a Urgencias, «mejorando con todo ello la calidad de estas personas y con un ahorro de costes de un millón de euros anuales en 2021 si lo comparamos con los costes de 2019 que los usuarios de residencias reportaron al sistema sanitario, básicamente por ingresos hospitalarios».
Pedro Abizanda avanzó que su Servicio está en conversaciones con el Sescam para que estos equipos de continuidad asistencial en el medio residencial se mantengan y cuenten con estructuras estables y que no desaparezcan cuando deje de haber casos de Covid.
De hecho, estos resultados de ahorro económico gracias a la intervención de los ECAR son parte del estudio realizado por el Servicio de Geriatría del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete en el ámbito residencial durante la primera ola de la pandemia, del que ya se publicaron dos estudios científicos, uno sobre la mortalidad y otra sobre las repercusiones funcionales y psicológicas.
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