Javier D. Bazaga

NOTAS AL PIE

Javier D. Bazaga


Errores que alimentan la política

17/03/2023

Hace poco un responsable de comunicación política me decía que, a falta de poco más de dos meses para las elecciones, «lo importante es llegar sin cometer errores». Suele ser una de las estrategias más conservadoras, pero más efectivas. No hace falta arriesgar demasiado, con no equivocarse basta muchas veces para andar el camino. Y más en unas elecciones que se empiezan a ver como un plebiscito nacional, a pesar de ser municipales y autonómicas, ya que los deslices y acontecimientos que ocurran tanto en La Moncloa como en Génova, tendrán mucha influencia en el voto «de aquí», el de cerca.
Esa filosofía, la de cometer los menos errores de aquí a las urnas, no ha debido llegar a los oídos de Santiago Abascal, de Vox, que, al amparo del reglamento, volverá a someter al Congreso de los Diputados a una nueva moción de censura que no será sino otra exhibición de la falta de sentido del ridículo de la formación ultraconservadora, con muchas derivadas como consecuencia. Entre ellas, la de someter a los ciudadanos, amantes de la política como bien superior al servicio del pueblo, a presenciar un espectáculo lamentable de circo político. «Pornografía política» lo ha llegado a calificar el presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Es la segunda moción de censura que impulsa Abascal. Y si la primera pudo tener algún sentido –por aquello de la unidad, Santiago y cierra España, y sus c*j*nes encima del caballo con la camisa desabotonada–, ésta llega con plataforma adaptada para la tribuna de oradores y bastón, en manos de un personaje que tuvo su reputación, mancillada ahora por el ridículo.
Un espectáculo que podría tener cierto interés si no fuera porque el resultado se conoce desde hace demasiado tiempo. Nos queda, como cuando relees un buen libro, del que conoces de sobra el final, dejarse sorprender por esas partes internas en las que has olvidado detalles. Es lo que le queda a Ramón Tamames, sorprender a un hemiciclo que sabe el final, y que ahondará en esa esperpéntica escena que se dará la próxima semana en el Congreso.
Ahora bien, que si hablamos de no cometer errores de aquí a las elecciones, son varios los partidos que deberían tentarse la ropa antes de hablar porque, si algo ha quedado claro, es que aquí nadie está en condiciones de dar lecciones a nadie: Ni Osorio ni Mónica García con el bono social; ni el PSOE con los Tito Berni y ley del sí es sí; ni PP con sus capítulos judiciales; ni Podemos o confluencias con sus desavenencias.
Quedan más de dos meses para las elecciones, autonómicas y municipales, pero que se verán condicionadas por las corrientes que lleguen de la política nacional. No cometer errores es la estrategia más buscada a día de hoy por los partidos políticos, pero pensar en el bienestar de los ciudadanos puede que sea la vía más rápida para lograrla.