Sí, les voy a proponer que este año no se vayan de veraneo. Bueno, más bien que se guarden sus recursos vacacionales para algo mejor: disfrutar a tope en Feria. De todos es conocido que se nos viene un Ferión, tras dos años de no abrir la Puerta de Hierros como la Virgen de los Llanos manda y gusta. Por ello tenemos que estar a la altura de la oferta que será amplísima, sabrosa y variada. Medio Albacete, desde todos los sectores profesionales, trabajan fuerte desde hace meses para que los diez días más esperados del año por estos lares, por fin, sean de auténtica excepción y a todos los niveles. Muchas veces, en esta misma columna, hemos hablado de que la Feria es nuestra empresa local más potente. Se prevé que este año podría alcanzar un volumen de negocio superior a los 120 millones de euros, de los que un 90% se queda en la ciudad. También, en anteriores ocasiones se apuntó en estas líneas que el ciclo ferial podría suponer, tras este lamentable impasse, un punto de inflexión en una castigada economía local que la anhela como un elemento revitalizador tan extraordinario, como imprescindible. Y es en este preciso punto en el que todos los albaceteños, tan amantes y defensores de nuestra Feria que somos, deberíamos plantearnos guardar para gozar. Huelga decir que a todos nos apetece escapar a vacacionar a las playas o a las montañas. Sobre todo, tras dos estíos en los que viajar no ha sido fácil. Pero el momento quizá requiere de un esfuerzo especial que, seguro, a algunos de ustedes no les hará tilín. Creo que, sin duda, merece la pena que en plena canícula renunciemos, en parte, al placer del veraneo para que lo demos todo en nuestra añorada y querida Feria. Esto redundará en el bien de todos y, por ende, en el de una ciudad que, doliente y sufridora, necesita coger fuerza para mirar al futuro con ilusión renovada. Y ya estamos tardando en hacerles llegar a los fans feriales foráneos, que se cuentan por cientos de miles, un mensaje claro y conciso: este año hay Feria y os queremos a todos aquí. Y si, es posible, con los bolsillos llenos. De que os divirtáis, y que repitáis, ya nos encargaremos nosotros. Por favor no fallemos en lo más fácil.