La Gerencia de Atención Integrada de Albacete, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha recibido un reconocimiento por su respuesta de ingeniería hospitalaria durante la pandemia. Ha ocurrido en el 38 Seminario y Congreso Nacional de esta disciplina celebrado recientemente en la ciudad asturiana de Gijón.

La Asociación Española de Ingeniería Hospitalaria, organizadora de este encuentro con la colaboración del Gobierno del Principado de Asturias, ha querido homenajear a los equipos de ingenieros, arquitectos y técnicos que han puesto en marcha dispositivos sanitarios para dar solución a la crisis sanitaria originada por la Covid-19.

En concreto, el Equipo de Mantenimiento del Hospital Perpetuo Socorro de Albacete ha sido el encargado de presentar la labor realizada en sus dependencias. El responsable del grupo, Pedro Alonso, comenta que "este premio es un reconocimiento al esfuerzo de todos los componentes del Servicio, que durante aquellos días trabajaron al máximo". Además, al total empeño e implicación de los profesionales, se sumó el refuerzo por parte de la Dirección de Gestión, no solo de Mantenimiento, sino de servicios como Limpieza, Lavandería, Cocina, Celadores y Logística, para así hacer frente a la mayor presión asistencial y de prestación de servicios.

Ante la incidencia de la pandemia, la Gerencia de Atención Integrada de Albacete puso en marcha un Plan de Contingencia para actuar con celeridad ante las necesidades causadas por la pandemia. Para ello, se diseñaron nuevos circuitos asistenciales y se cambió la funcionalidad de distintos espacios con el objetivo de reorganizar la actividad en el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete.

En el Hospital General, se crearon dos salas de pre-ingreso, una en la sala de espera de pacientes de Urgencias y otra en la sala de espera de familiares de pacientes críticos, con capacidad para 44 camas dotadas de oxigenoterapia. Estas salas, así como otras medidas contempladas en el Plan de Contingencia, permitieron ampliar la capacidad de encamación convencional del CHUA en 233 camas. Igualmente, con el trabajo de los profesionales de Mantenimiento, se pudo pasar de 30 a 96 camas de críticos. Además, fuera del Complejo, se habilitó un espacio en la Facultad de Medicina, con 145 camas con toma de oxígeno, ampliable a 198.

Mientras tanto, en el Perpetuo Socorro, como recuerda Pedro Alonso, "la primera intervención que hicimos fue en la Sala de Fisioterapia". Allí se creó una nueva Unidad de Hospitalización. Además, se realizó el traslado de la hospitalización de agudos de Salud Mental y la UTCA a la Unidad de Media Estancia. Unos trabajos técnicos que también supervisó el Equipo de Mantenimiento.

Seguidamente, los profesionales de la GAI de Albacete pudieron actuar sobre toda la planta cuarta del Hospital Perpetuo Socorro, donde comenzaron a llegar los primeros pacientes con Covid. Y solo unos días después, acondicionaron la planta segunda, tercera y cuarta de las consultas externas. En total se instalaron 210 nuevas camas y 250 puestos de oxígeno, así como la ampliación de las camas de críticos. Unos trabajos que precisaron del arreglo de caudalímetros o la instalación eléctrica, entre otras muchas labores.

Esta experiencia es la que se ha presentado en el encuentro celebrado en Asturias y donde se han dado cita los mejores profesionales del país y responsables del sector en hospitales como el Gregorio Marañón de Madrid, el Universitario Río Hortega de Valladolid, el Vall d´Hebrón de Barcelona, el Regional Universitario de Málaga, el Central Universitario de Asturias o el Complejo Hospitalario de Navarra, entre otros.

Al comienzo de la pandemia, en todas las comunidades autónomas se dieron situaciones parecidas en las que el personal técnico de gestión hubo de hacer frente a la necesidad de ampliar espacios y adaptar sus instalaciones en aquellos difíciles momentos.

Desde el Equipo de Mantenimiento de la Gerencia de Atención Integrada de Albacete en el Hospital Perpetuo Socorro, valoran el reconocimiento colectivo que supone este premio, "Ingeniería en Acción", pues significa el aprecio por la lucha que realizaron ante la Covid; una batalla en la que también contaron con voluntarios del colectivo empresarial albaceteño, "soldando cobre, haciendo bajadas", explican los técnicos. Al final, gracias a la disminución de la presión asistencial, solo hubo que usar una pequeña parte de las nuevas instalaciones.