De forma desigual. Así han sido las consecuencias del estado de alarma y el confinamiento de la población en las 12 localidades que integran el grupo de acción local (GAL)de la Sierra del Segura.
Con el fin de trasladar al Gobierno de Castilla-La Manchas las dificultades por las que atraviesan los diferentes sectores económicos que dinamizan esta comarca, el GAL ha elaborado, enviado y analizado una encuesta para el tejido económico y productivo de la Sierra del Segura, con el fin de conocer su situación actual ante el Covid-19. Los resultados han puesto de manifiesto el diferente impacto que ha tenido el confinamiento y el periodo de desescalada en cada sector, pues mientras la alimentación ha obtenido beneficios por la prohibición de la movilidad, el turismo, el comercio y la confección se han visto bastante perjudicados.
Según confiesan las propias tiendas de alimentación locales, la crisis del Covid ha producido un considerable aumento del consumo local ante la imposibilidad de desplazarse a grandes superficies de Albacete, Hellín o Murcia. Una vez superado el estado de alarma, «deberíamos aprovechar estos nuevos hábitos y lazos de consumo con lo local para reforzar este comercio», aconseja el GALde la Sierra del Segura.

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