El Complejo Hospitalario Universitario de Albacete ha realizado ya 900 queratoplastias, trasplantes de córnea, desde 1999 que se puso en marcha en la provincia este programa de trasplante, gracias a la donaciones solidarias de tejidos de los pacientes.

Durante el 2021 la Unidad de trasplante de córnea del Complejo Hospitalario de Albacete practicó  un total de 51 queratoplastias, una cifra que casi duplicó las 33 realizadas en 2020 el primer año de la pandemia del coronavirus. El 2019 fue el año récord, gracias al aumento de las donaciones de órganos, ya que se realizaron 62 trasplantes de córnea. En lo que llevamos de año ya se han realizado 15 de estas cirugías que permiten mejorar la visión a muchas personas con problemas de opacidad en la córnea.

Precisamente de las nuevas técnicas actuales en trasplante de córnea de las que dispone el Servicio de Oftalmología del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete (CHUA) hablará mañana el doctor José Manuel Granados, jefe de sección de superficie ocular del CHUA, durante el XII Congreso de la Sociedad Castellano-Manchega de Oftalmología, Oftalmocete 2022, que se celebra en la capital albacetense, y en el que participan más de un centenar de especialistas en Oftalmología de la región, incluso algunos ponentes de renombre a nivel nacional e internacional, tras dos ediciones de parón por la pandemia del coronavirus.

actividad. A la semana los oftalmólogos de la GAIde Albacete ven entre 25 y 30 pacientes con enfermedades de la córnea, ya que de media estos especialistas hacen una o dos consultas diarias específicas de esta dolencia del ojo. 

En el caso de los pacientes que reciben un trasplante de córnea, según el doctor Granados, el seguimiento es periódico y continuado «en realidad a estos pacientes nunca les damos el alta».

Aunque los primeros trasplantes de córnea llevados a cabo en el centro hospitalario albacetense fueron previos a 1999, por parte del doctor Juan Belmonte, y después del doctor Julio Carrilero, como pioneros en esta cirugía, pero después se suspendió esta operación durante unos años y a partir de 1999 se reinició con la acreditación correspondiente para la práctica de esta intervención con todas las garantías y estándares de calidad para los pacientes.

Hay enfermedades genéticas y hereditarias que pueden afectar al endotelio y poner turbia y opaca esta parte del ojo ocasionando la pérdida de visión, pero también los traumatismos, las infecciones por bacterias o por hongos que dejan como secuelas una cicatriz o cirugías complicadas, como la de cataratas, pueden conducir a una opacidad de la córnea irreversible y hacer que el paciente precise de un trasplante.

Pero no sólo son éstas las indicaciones para que el tratamiento pase por una cirugía, un trasplante de córnea, sino que en opinión del doctor José Manuel Granados, «es necesario que el resto de estructuras del ojo estén relativamente bien para que el pronóstico visual sea aceptable tras el trasplante. 

Aunque año tras año aumenta la generosidad de los donantes de órganos y de tejidos, en la actualidad el CHUA dispone de menos córneas donadas de las que sería deseable en relación al número de pacientes que esperan un trasplante. En concreto, el doctor Granados informó que la lista de espera oscila entre los 25 y 30 pacientes.

El Complejo Hospitalario recibió hace unos meses la acreditación como Banco de Córneas, y se suma al de Alcázar de San Juan, en la región.

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