«La zarzuela triunfa más fuera de España que en nuestro país»

Antonio Díaz
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La soprano María del Valle Robles de Moya, joven promesa de la lírica albacetense, fue una de las protagonistas de la Gala Lírica que se celebró en el Teatro Circo, en la que también participó la Banda Sinfónica Municipal de Albacete

María del Valle Robles de Moya, soprano. - Foto: Rubén Serrallé

La soprano María del Valle Robles de Moya, joven promesa de la lírica albacetense, fue una de las protagonistas de la  Gala Lírica que se celebró en el Teatro Circo, en la que también participó la Banda Sinfónica Municipal de Albacete, dirigida por Miguel Vidagany, y que constituyó un gran éxito para todos los músicos que se dieron cita en el escenario. La artista comentó a La Tribuna de Albacete sus proyectos.

¿De dónde viene su vocación por la música?

Tengo la suerte de venir de una familia de músicos y amantes de la cultura. Mi abuela Maribel fue la primera soprano titulada de Albacete, consiguió el título Superior de Música y es gracias a ella por la que estudié Música y soy cantante. Luego, mi abuelo Emigdio es un gran aficionado a la zarzuela y, mientras que pudo, impulsó la cultura de nuestra ciudad. También mi madre se ha encargado muchos años de los conciertos didácticos con la Banda Sinfónica Municipal, desde la Escuela de Magisterio y me ha formado en este campo, claro, llevándome al Conservatorio y enseñándome a tocar el piano y con clases de canto. Tengo que agradecer la formación que me dio Ana Luisa Espinosa, que fue mi maestra, y luego, Fuensanta Morcillo. Sin lugar a dudas, he tenido mucha suerte.  

¿Satisfecha del encuentro en el Teatro Circo que fue tan singular para todos los participantes?

Para mí, fue todo un honor, un privilegio y un orgullo poder cantar  en el Teatro Circo, con un público tan excelente, que nos dio una extraordinaria acogida, aunque exigente y entendido, que supo responder muy bien a las interpretaciones que hicimos; fue muy agradecido y cariñoso. Cantar acompañada por la Banda Sinfónica Municipal de Albacete y su director, Miguel Vidagany, como he dicho fue un honor, porque son grandes profesionales y que, en mi caso, por ejemplo, han constituido los mejores recuerdos de mi infancia, porque desde que era pequeña he sido asidua de los conciertos de la banda, ya que recuerdo ir a escucharlos todos los domingos al Auditorio Municipal y en otras ocasiones al Teatro Circo. La actuación fue todo un sueño hecho realidad porque compartí escenario con los músicos que configuraron mi infancia, un elemento fundamental en mi gusto por la música. Así que no puedo estar más satisfecha de esta cita. 

¿Qué repertorio escogió para un concierto tan importante?

Interpreté romanzas de zarzuela junto con otros tres dúos, dos de ópera, porque para mí, la zarzuela es la ópera española y mi género favorito, ya que es de una delicadeza comparable con la ópera y, además, tiene un componente didáctico y costumbrista del pueblo español. Me parece que al ser parte de nuestra historia, patrimonio y cultura, la zarzuela puede llegar a la gente joven. Es una buena forma atraer a un público más joven a la música clásica, hacia la belleza y estética de la música, a través de la zarzuela, un género mucho más cercano, costumbrista y que cuenta fielmente las hazañas del pueblo español y su forma de ser. Luego tenemos grandes músicos españoles que han sido compositores de zarzuela, que conforman nuestra historia, comparables y en algunos casos sobresalientes a músicos de otras nacionalidades y del género operístico. 

¿Cree que el público joven se puede acercar a la zarzuela, en vez de al hip hop o el trap?

Por supuesto, el hombre está ansioso de belleza y el ser humano es espiritual. La conexión que se establece entre la espiritualidad, el hombre, el ser y la belleza se puede conseguir a través del arte y una de las expresiones del arte es la música. La voz es el primer instrumento de la humanidad, singular, propio y exclusivo de la especie humana, entonces, la zarzuela, en la que predomina la voz, un estilo y una estética, por supuesto que tiene muchísimo más que aportar al espíritu que el hip hop o el trap, que sí pueden ser ritmos, pero carecen de una melodía bien asentada y, sobre todo, de una intencionalidad moral, de tener algo bueno que transmitir, no solo entretener al oído y al oyente, sino que quien lo disfruta, puede experimentar una catarsis, que en eso se basa el teatro, en salir mejor de lo que has entrado. Considero otro tipo de subgéneros, que no los considero géneros musicales, carecen totalmente de esta finalidad. 

Termina ahora canto.

Sí, estoy acabando Canto en la Escuela Superior de Canto de Madrid y a la vez estoy haciendo el doctorado en Artes y Humanidades en la Universidad de Castilla-La Mancha, lo que combino con el Magisterio y ahora soy maestra en un colegio concertado en Madrid y estoy muy contenta.

¿Hay tiempo para todo, trabajo, ensayos y también para terminar la carrera de Canto?

Como dice mi madre, todo es cuestión de organizarse. Es cierto que las actividades artísticas demandan mucho tiempo, dedicación, concentración y constancia y compaginar estudios y trabajo es complicado, pero se hace. 

¿Cuáles son sus planes profesionales más inmediatos?

Quiero presentarme a algún concurso. Me gustaría el año que viene estar en el Ciudad de Albacete de Canto y a otros concursos a nivel regional o nacional y, en algún momento me plantearía preparar las oposiciones al Coro del Teatro de la Zarzuela, porque como he dicho, es mi género favorito y me haría mucha ilusión trabajar allí. 

Los cantantes suelen decantarse por las grandes producciones operísticas y la zarzuela está en segundo plano.

Efectivamente, creo que se debe a varios factores. Uno de ellos es la poca publicidad que los españoles nos hacemos a nosotros mismos y lo poco que valoramos nuestra genialidad, nuestra historia y cultura y desde las Escuelas de Música y los Conservatorios se relega un poco el género y muchos de los músicos que salen formados de nuestros centros carecen del conocimiento suficiente de este género, la zarzuela, y por eso no se animan a dedicarse a él. Luego, al ser un mundo no tan conocido como el operístico, no se invierte en zarzuela, cuando hay músicos en este país muy bien preparados que estarían encantados de participar en grandes producciones de zarzuela y, como siempre pasa, la zarzuela triunfa más fuera de España que en nuestro propio país y creo que es misión de las nuevas generaciones musicales alzarnos y reivindicar lo nuestro, porque está muy bien lo de fuera, pero sin olvidar que lo nuestro es igual, si no mejor.

Es complicado, seguro, pero ¿ puede decirme qué compositores y obras son sus preferidos?

He de reconocer que Barbieri me parece el mejor compositor de zarzuela y me encanta El barberillo de Lavapiés. Me gusta El arlequín de La Generala, de Amadeo Vives;La canción del ruiseñor, de Doña Francisquita; La primorosa, de El barbero de Sevilla; o la zarzuela Jugar con fuego, porque hay tantísimo escrito. Bueno, si tuviera que elegir una,  me quedo con Marina, e Emilio Arrieta. Además, son todas muy exigentes vocalmente.

Ahora que hablamos de exigencia vocal, ¿qué tesitura tiene?

Soy soprano lírico ligera, de momento, porque todos sabemos que la voz cambia.