El Villarrobledo se hizo fuerte en casa tras vencer por la mínima al Tarancón en un duelo de urgencias. El cuadro dirigido por José Luis Fuentes consiguió finiquitar su racha de tres encuentros consecutivos sin ver portería, y ese solitario gol le sirvió para conseguir puntos, algo que ha hecho en cuatro de sus cinco últimos compromisos. Por su parte, el equipo taranconero se hunde en la tabla y no gana desde la segunda jornada de liga.

Desde un primer momento, fue el conjunto villarrobledense el que llevó la iniciativa en el juego. En el minuto 8, Biho remató de cabeza dentro del área y Chino intervino de forma providencial para desviar el balón a córner. Poco después, fue Ochoaizpur el que tomó el protagonismo ofensivo para su equipo. En dos situaciones consecutivas, el mediocentro formado en las categorías inferiores de Boca Juniors buscó sendos disparos desde la frontal del área, pero ambos fueron frustrados por la defensa del cuadro blanquiazul. Álvaro Collado también probó fortuna en este momento de asedio, pero no pudo precisar su finalización.

El Tarancón tan sólo era capaz de desperezarse en alguna acción aislada por banda, en las que nunca consiguió conectar bien con los hombres que entraban a buscar el remate. Por su parte, el Villarrobledo cocinaba a fuego lento el 1-0, quizás con demasiada paciencia, pero sin cometer errores en la creación. Era el último cuarto de cancha el que se le atragantaba, y donde no encontraba la inspiración necesaria para asediar la portería defendida por Chino.

El planteamiento defensivo de los hombres de Adrián Algarra no impidió, sin embargo, que el equipo estuviera a punto de estrenar el marcador a balón parado nada más comenzar el segundo tiempo. Fue Del Val el que estrelló en el larguero una falta directa en una posición cercana al área. Poco después de esta ocasión -la más clara del Tarancón en el encuentro- llegó el gol que tanto buscaba el Villarrobledo. En una jugada elaborada entre varios futbolistas, De la Morena tiró de calidad para encontrar a un Marcos Moreno que se encontraba en posición cómoda para el remate. El atacante sorprendió a todos al ceder ese balón a Álvaro Collado, que definió a placer para colocar el primer tanto en el marcador.

Una vez marcado el gol, los pupilos de José Luis Fuentes cambiaron roles con su rival y bajaron un par de líneas con la idea de resguardar ese 1-0. El Tarancón, en consecuencia, salió de su campo para buscar el empate. Liderados en gran parte por Del Val, los discípulos de Adrián Algarra acabaron embotellando al cuadro rojillo en su área, pero no fueron capaces de lograr la igualada.