La San Silvestre regresó, en su XVII edición, tras dos años de no poder celebrarse debido a la pandemia. Y lo hizo en la nueva ubicación que el Ayuntamiento ha buscado para sus pruebas atléticas, la explanada delantera del Recinto Ferial. Tras el buen recibimiento que tuvo el 10K Nocturno, hasta allí se trasladó una San Silvestre que volvió a ser una fiesta, con más de 6.000 participantes entre la San Correpatas, la San Silvestre infantil y la prueba reina, que una vez más mostró el carácter alegre y divertido con el que los albacetenses despiden el año haciendo deporte.

El ganador fue Jesús Ángel Rodríguez, gran dominador de este tipo de pruebas en los últimos años y que no dio opciones a sus rivales, adjudicándose la prueba con un tiempo de 14:34 en los aproximadamente cinco kilómetros que tuvieron que recorrer los participantes. Un poco más lento, pero apenas ocho segundos después, entró el triatleta David Castro, que volvió a demostrar que la carrera a pie es uno de sus fuertes. Completó el podio Alejandro Ortuño, entrando después un largo elenco de atletas del Club Atletismo Albacete-Diputación, sin lugar a dudas el más numeroso en esta San Silvestre, como el veterano y varias veces ganador de la misma Severino Felipe.

En el capítulo femenino, la presencia de atletas del nivel de María José de Toro o María Ángeles Magán fue superada por la juventud de Alicia Lázaro, albacetenses que corre para el Juventud Elche, que hizo un tiempo de 17:18, siendo segunda clasificada la atleta del Albacete-Diputación Marta Moreno. El podio lo completó Andrea Torres, otra joven atleta del Albacete-Diputación.

Los participantes volvieron a deleitar con sus disfraces  al numeroso público que se congregó,  tanto en la meta como en varias partes del recorrido. El premio individual se lo llevó el disfraz de ducha, con todos sus elementos, incluida la cortina. El premio colectivo fue para el grupo disfrazado de nevera, con sus diferentes elementos.