Los trabajadores de la sociedad pública Tragsa se emplean, desde hace unas semanas, en la ejecución del plan de adecuación de la red viaria del Conjunto Histórico-Artístico de Alcalá del Júcar. Por ello, el trasiego de obras en el municipio ha sido casi continuo, ya que los trabajos previos de este proyecto llegaron a solaparse con los últimos de la reparación del desprendimiento del barrio del Ceñajo, ya concluidos y de los que también se encargó esa entidad.
Este nuevo proyecto, gestado tras un minucioso proceso de participación ciudadana, fue solicitado por el Ayuntamiento alcalaeño al Ministerio del Fomento, dentro de las convocatorias del 1,5% Cultural, programa que destina ese porcentaje de los presupuestos de obras públicas estatales a la conservación del patrimonio histórico español.
El Ministerio dio una alta puntuación a la propuesta y la seleccionó en 2018, con un presupuesto final de 1.251.571 euros, de los que el Gobierno central aporta el 73% (887.028), mientras que corresponde al Ayuntamiento costear el resto. Para afrontar esa financiación, cuenta con el apoyo de la Diputación Provincial que, a través de un convenio aprobado por el#Pleno, colaborará con 70.000 euros en dos anualidades.
El objetivo de las obras es sustituir y unificar el pavimento del Conjunto Histórico-Artístico de la localidad, reconocido como tal en 1982. Según detallaba el alcalde, Pedro Antonio González, el proyecto «alcanzará aproximadamente el 80% del callejero» de ese núcleo urbano, concluirá «entre finales de septiembre y el mes de octubre» y se aprovechará además «para renovar las instalaciones de las calles, como redes de alumbrado y de distribución de agua».
De acuerdo al proyecto publicado por Fomento, la propuesta se basa en el propósito «de mantener los modelos tradicionales mediante el uso de elementos como la losa y los adoquines, todos ellos de material pétreo natural, granito».
Más información en la edición impresa y en la APP de La Tribuna de Albacete (https://latribunadealbacete.promecal.es)