«El cáncer forma parte de nuestra propia esencia biológica»

Teresa Roldán
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«Hoy en día es más fácil sobrevivir a un cáncer que sucumbir a esta enfermedad, porque más del 50% de tumores malignos se curan totalmente»

Carlos López-Otín, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Oviedo. - Foto: José Miguel Esparcia

Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Oviedo, doctor honoris causa por varias universidades, Carlos López-Otín volvía por segunda vez este año a la ciudad de Albacete, en esta ocasión para dar la conferencia Conocer para curar, dentro del Tour del cáncer organizado por la AECC que recorrerá una treintena de ciudades españolas para aumentar la visibilidad de la población sobre la enfermedad y los servicios gratuitos que ofrece la asociación. El doctor López-Otín combina sus responsabilidades docentes con sus líneas de investigación en Cáncer y Biología del envejecimiento, así como el análisis funcional de genomas. Entre su gran palmarés de reconocimientos figura el Premio Nacional de Investigación Santiago Ramón y Cajal 2022. No en vano es uno de los científicos españoles más prestigiosos de España, con el permiso de otro gran científico internacional de nuestra tierra, el hellinero Juan Carlos Izpisúa, con quién tiene amistad y comparte artículos e investigaciones .

¿Es la primera vez que viene a Albacete a dar una conferencia?

No es la segunda, vine hace dos meses para participar como ponente en el Congreso nacional de Geriatría. Fue un día inolvidable para mí, por la calidad de los ponentes, por la atmósfera que se creó en el Congreso, fue excepcional.

¿Como sienta recibir el Premio Nacional de Investigación Ramón y Cajal 2022?

He tenido muchos reconocimientos y estoy muy agradecido, pero sin duda el Premio Nacional de Investigación Ramón y Cajal es un grandísimo orgullo, lo mismo que los doctorados honoris causa, tienen un componente extraordinario, pero todos los premios no son  nada comparado con tener el respeto de mis alumnos y  mis discípulos, ese para mí es el mejor premio.

¿El mejor premio para usted como científico son los hallazgos de sus investigaciones?

Sin duda, pero yo eso lo percibo como nuestra responsabilidad como investigadores hacer descubrimientos, y sin duda la satisfacción que genera es infinita no sólo por lo que representa se avance en el conocimiento sino por ayudar a la gente.

¿Descubrir el genoma de centenares de pacientes con cáncer ha sido toda una aventura?

Ya son miles de pacientes con cáncer de los que hemos descifrado el genoma, es una aventura científica que empezamos en 2008 porque antes no existía la tecnología, antes estudiábamos gen a gen, pero ese año se desarrolló una tecnología que nos permitiría en pocos años, y así ha sido, descifrar los genomas completos de las células tumorales de cada paciente y compararlo con las células normales de ese paciente y así aprender dónde están las mutaciones y los cambios que se han producido, y eso es lo que ha abierto el campo a la Oncología personalizada que es de lo que he hablado en esta conferencia. Ese es el futuro, porque no hay dos tumores iguales ni siquiera del mismo tipo y con el mismo nombre. De más de mil pacientes que hemos descifrado el genoma no hay dos pacientes iguales, con los mismos cambios y mutaciones. Esto son descubrimientos muy importantes y abren un camino. Pero también hemos descubierto la causa de enfermedades que tienen dos personas solamente en todo el mundo, y la emoción, la satisfacción y la gratitud de los pacientes y sus familias es infinita. Se trata del síndrome de Néstor y Guillermo. Ellos no se conocían entre sí y resultó que tenían la misma mutación en un gen que nunca se había encontrado asociado a enfermedades, padecían progeria, una extraña enfermedad hereditaria que causa el envejecimiento prematuro en plena infancia y sitúa la esperanza media de vida en 15 años.

 

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