Es una corrida seria, de Madrid, pero en hechuras muy puras de la casa Victorino, y bien escogida por la trascendencia que tiene este festejo, ya que se trata de la vuelta de las corridas de toros a la primera plaza del mundo, desde la feria de otoño de 2019, con el paréntesis del festival celebrado el pasado 2 de mayo.
Mucha expectación ha suscitado entre los aficionados hasta el punto de que el primer día que se pusieron a la venta las entradas, la cola de abonados daba la vuelta a la plaza. A pesar de que la Comunidad de Madrid ha suavizado los aforos y ahora se permiten hasta el 50%, la empresa no ha podido reubicar las entradas que ya estaban emitidas, por lo que para este festejo, solo se venderán 6.500 localidades de un total de casi 24.000 que tiene la plaza.
Sergio Serrano ha pasado los últimos días muy metido en su preparación, tanto técnica, como física y mental, por lo que acudirá el próximo sábado en perfectas condiciones a esta cita tan importante, acudiendo hace unos días a tentar en la ganadería de Victorino Martín, además de ponerse en manos de su preparador físico Víctor Zafrilla, tal y como recoge Francisco Javier Martínez en la edición digital de La Tribuna de Albacete.
Hace una semana el torero albacetense señalaba en estas mismas páginas: «Son muchos años en la profesión, sacrificado por y para ello y sin poder dar ese salto que me falta, pero bueno, sería porque había que seguir puliendo y todo llega cuando tiene que llegar. Esto es muy difícil, todos lo sabemos, y hay años que te hacen preguntas y otros que te dan las respuestas, por lo que esperemos que sea el momento de posicionarme. Está siendo poco a poco, con pasitos cortos, aunque saboreando todo lo que me pasa, porque tienes pequeñas recompensas y esta es una más». También hablaba de la ganadería: «No he matado nunca un toro de Victorino, lo he hecho de Adolfo y Saltillo, pero el hierro de Victorino es el rey de este encaste y la categoría que tiene por su historia, es muy grande, por lo que todos soñamos con poder matarla y estar anunciado con esos toros es un aliciente más».