La sorprendente aparición de un logo de la Junta de Castilla-La Mancha en el cumpleaños de Tamara Falcó Preysler tiene diferentes lecturas. La primera, y más inmediata, es pensar qué hacía allí, en el photocall de un evento privadísimo, junto a otros pertenecientes a empresas habituales en este tipo de salseos. A continuación, lo que nos interesa saber es cómo llega hasta ahí el símbolo de nuestra región y qué tipo de contraprestación -sea económica o en especias- ha conllevado dicha acción. Al parecer no se ha tratado de un patrocinio con dinero de por medio; sino de un lote de alimentos que fueron cedidos desde la marca autonómica pagada con dinero público, Raíz Culinaria, a modo de promoción para que la jet madrileña pudiera degustarlos en el sarao en la que la influenciadora adquiría categoría de noble cuarentona. Pero de todo esto aún no se tiene constancia real de nada ya que nadie desde la Junta -ni de forma oficial u oficiosa- se ha dignado a contestar ante tal revuelo. Y es aquí donde no debemos de callar, como hacen ellos, otorgando el beneficio de la duda. Podemos discrepar de los que, por razones de imagen que no llegamos a entender, deciden fichar a esta celebridad madrileña para representar al turismo de Castilla-La Mancha. Lo único que la une con nuestra tierra son los fines de semana que ha pasado en la finca toledana de su padre, el finado marqués de Griñón. En cualquier caso, habría sido más lógico contar para ello con su hermanastra Xandra Falcó que sí trabaja en las bodegas familiares. No sabemos lo que se embolsó la hija de la Preysler por subir cuatro tontadas a sus redes sociales. Tampoco si realmente aquello atrajo algún visitante a la zona. Lo que sí sabemos es que una gran mayoría no se siente representada por sus dudosos méritos y valores. Y de aquellos lodos parecen que vienen estos barros. Aunque hay otras voces que apuntan directamente a la revista de moda que coorganizó el cumple como la verdadera razón por la que se logo de la Junta luciera en un lugar, seguramente, impropio para ello. Y es que la publica un poderoso grupo editorial que, entre sus diferentes cabeceras, incluye a un importantísimo periódico de tirada nacional que siempre suele estar bastante más a favor de Page que del presidente Sánchez. Piensen mal y acertarán.