Del barroco al siglo XX

Antonio Díaz
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Francisco Javier González Navarro, cello, y Luis Ángel Arteaga Onofre, contrabajo, ofrecieron un concierto en la calle Ancha con un programa navideño y sin olvidar la gran música

Un momento del concierto a pie de calle, con Luis Ángel Arteaga Onofre, contrabajo, y Francisco Javier González Navarro, cello. - Foto: Rubén Serrallé

Es ya otro de los atractivos de estas fechas en la capital, con la programación navideña del Ayuntamiento de Albacete que lleva la música a distintos rincones, a pie de calle, como el encuentro que llevaron a cabo Francisco Javier González Navarro, cello, y Luis Ángel Arteaga, Onofre, contrabajo, con un concierto festivo, pero también muy cuidado, ya que ambos, además de los típicos villancicos, ofrecieron música menos transitada, muy bella, de todas las épocas, del barroco al clasicismo, para terminar en el siglo XX.

Francisco Javier Navarro comentó que hemos realizado, «como bien dice el título, un concierto navideño, en la calle Ancha, en este caso, una segunda edición de lo que hicimos el pasado año, que fue también histórico, con villancicos de Bach, pero este año quise traerme un compañero, Luis Ángel Arteaga, enorme con el contrabajo».

En este sentido, Luis Ángel Arteaga confirmó que «en estos contextos, la música sinfónica viene siendo relativamente nueva y este tipo de citas son muy valiosas, porque se trata de entregar, como hemos hecho, la música al ciudadano, acercársela en su día a día, directamente. Hemos comprobado cómo se acerca el público, que te escucha atentamente, algo bueno para que después acudan al teatro, pero lo importante es acercar directamente la música».

La acogida fue fantástica, en este concierto navideño y variopinto, como lo definió Francisco Javier González, «porque interpretamos villancicos entre otras piezas barrocas, Couperin, clásicas de Haydn o Mozart, incluso llegamos a Bartók, obras cortas, que no se suelen escuchar normalmente, con la excepción de las arias de Mozart», duetos espléndidamente ejecutados por ambos músicos, de forma distendida y alegre, casi de salón navideño.

El público, dijo el chelista, «ha sido estupendo y  lo hemos pasado muy bien, han sacado sus móviles para grabar, se han quedado escuchando, incluso nos han hecho peticiones, algo que nos ha hecho tirar de memoria, pero lo haces muy contento, eso es precisamente lo interesante de esta cita, interactuar y llevar esta música a todos».

Luis Ángel Arteaga destacó que siempre están preparados para estas peticiones del oyente, «llevamos una buena cantidad de repertorio y sucede más de lo que nos pensamos, porque nosotros estamos acostumbrados a todo tipo de situaciones, con orquestas, cámara o en una cena de gala, si es preciso, tocas sobre la marcha, con el mayor respeto siempre».

Francisco Javier González, destacó que «estos conciertos a pie de calle están convirtiéndose en una tradición. Ya he hecho varios recitales con el Ayuntamiento, estos a pie de calle, con pequeños grupos de cámara también o como el que hice en verano, poniendo música a una película de Chaplin».

Luis Ángel Arteaga indicó que, tras esta cita en la calle Ancha, hay nuevos proyectos «como uno de  música sacra en Chinchilla y varias comas más».