Con datos hasta febrero, es decir "sin computar todavía los grandes efectos negativos de la invasión rusa en Ucrania", el sector agroalimentario se están enfrentando a una subida del gasólo del 80 por ciento, de la luz del 270 por ciento, de los fertilizantes de un 300 por ciento, de piensos de un 25 por ciento y de costes salariales de un 30 por ciento. Los datos los ha dado la portavoz del PP en las Cortes, Lola Merino. "Hoy producir cuesta lo impensable, cualquier agricultor y ganadero se cuestiona seguir", avisa, "no se peude producir tan a largo y plazo y tan constantemente a pérdidas".
Por eso el PP va a llevar al pleno de las Cortes de este jueves un debate sobre la subida de los precios, poniendo el foco en el campo. "Esa descontrolada subida, esa inflación, está quebrando la economía estratégica de Castilla-La Mancha", advierte, "si cae el sector primario, cae la economía de Castilla-La Mancha". Merino apostilló que la inflación en la región está al 9 por ciento, siendo la más alta de toda España. "Cualquier ciudadano, cualquier castellano-manchego está pagando mucho más caro el pan, la leche, los huevos, la carne", expuso.
¿Qué proponen los populares para compensar esta situación? En el ámbito autonómico plantean una bajada de impuestos. "Ofrecemos esta mano tendida al PSOE, a Page y que esa propuesta recoja una bajada de impuestos y rebajas fiscales, que es lo que en este momento necesita el sector", apostilló. Merino lamenta que seguramente "morderán la mano tendida de Núñez", pues recuerda que ya la semana pasada el PSOE votó en contra de las bonificaciones que llevaron a las Cortes para el sector primario y para las pymes, además de a una rebaja del tramo autonómico del IRPF, de actos jurídicos documentados o la eliminación de sucesiones y donaciones.
La portavoz del PP insiste en que los ciudadanos en general y el sector primario en particular necesitan menos impuestos. Por eso critica que precisamente este año vaya a entrar en vigor el nuevo canon del agua, con el que la Junta podría recaudar 70 millones al año. "Vamos a pagar más caro por beber agua y abrir el grifo de nuestras casas", alertó.