Los empresarios de la región confían en que este 2022 será un año mejor que el que acabamos de dejar atrás, y sin duda mejor que el 2020, pero aún ven «incertidumbre y nubarrones» que impiden un optimismo claro. «No va a ser un año normal» advirtió el presidente de la Confederación regional de empresarios (Cecam), Ángel Nicolás, que hizo este miércoles balance de lo acontecido y ofreció unas perspectivas sobre el año en curso en el que la principal amenaza sigue siendo la crisis sanitaria.

Del año 2021, Nicolás valoró un año «difícil para todos», en el que lo mejor fue el clima de diálogo y de consenso que ha permitido afrontar las dificultades en una «situación envidiable» en la región, con acuerdos muy importantes como el Pacto por la Reactivación Económica y el Empleo hasta 2024, o la Estrategia de Impulso al Trabajo Autónomo hasta 2025. Acuerdos que han seguido siempre el principio de «conseguir lo mejor para la empresa sin perjudicar al trabajador y viceversa».

Sin embargo, las perspectivas para 2022 vienen marcadas por una «enorme incertidumbre» aún por la cuestión sanitaria, ya que «no sabemos si habrá una séptima ola», pero también por otras variables que Nicolás destacó en la elevada inflación, la subida de materias primas, el impacto de los fondos europeos «que no acaban de llegar a las empresas», o el menor crecimiento mundial además de la subida del Salario Mínimo Interprofesional o la aprobación o no de la reforma laboral este jueves en el Congreso, «que hacen que no se favorezca la recuperación», pronunció lacónico, quizá también porque la recuperación que se esperaba para este 2021 no ha sido tan rápida ni tan vigorosa como se esperó en un principio, y que hace pensar que se trasladará a finales de 2022 o principios de 2023.

Los empresarios ven 2022 con «incertidumbre y nubarrones» - Foto: AngelesVisdomineEntre los «nubarrones» que atisbó también mencionó la caída del consumo de las familias, el incremento de los costes de las materias primas, la subida de precios «alarmante» por el precio de la luz, combustibles y falta de suministros, que han llevado a Castilla-La Mancha a tener «un peor comportamiento que la media» con una inflación del 7,6%, dato preocupante que «afectará a nuestra competitividad tanto nacional como internacional».

Pero hay más, la deuda de Castilla-La Mancha es ya de 15.607 millones de euros representado un 37,6% del PIB regional, colocándonos como la segunda comunidad más endeudada. Una acumulación de deuda a futuro que «va a traer consecuencias negativas» cuando los tipos de interés vuelvan a subir.

En los claros situó el mercado laboral con un «comportamiento positivo», y la evolución de los autónomos, con 1.600 más que en 2019, antes de la pandemia, sumando ya más de 150.700. Para ellos criticó la subida de la cuota porque «se hace sobre rendimientos netos» lo que generará «profundas desigualdadades», por lo que lo interpretó como «una fórmula meramente recaudatoria».

Nicolás pide al Congreso «generosidad» para aprobar la reforma laboral

«Espero que se actúe con cabeza y se tenga la misma generosidad que hemos tenido los agentes sociales» dijo Ángel Nicolás sobre el trámite parlamentario de la reforma laboral que llega hoy al Congreso de los Diputados. «Lo difícil ya está hecho, que era llegar a un acuerdo» subrayó el presidente de la Confederación regional de empresarios sobre este punto que ha supuesto «una larguísima negociación», y que ha sido «aplaudido desde Bruselas». Un acuerdo que «da confianza y estabilidad» y que, como toda negociación, supone «dejarse pelos en la gatera».

En este punto diferenció a los agentes sociales que «nos movemos por intereses generales y ninguno vivimos de esto», de los partidos políticos que «no son capaces de acordar porque son partidos y ellos se juegan sus votos, su objetivo es ganar las elecciones, nosotros no». Es por eso que esperó su aprobación y que «no se modifique».

No es el momento

También reiteró que para la subida del salario mínimo interprofesional no es el momento. «Seguimos viéndolo poco oportuno» como ya se dijo hace meses y seguirán reivindicándolo próximamente.

A favor de reducir las cuarentenas

En diciembre, las empresas de la región soportaron un incremento de bajas laborales por Covid del 800%. Una cifra inasumible para muchos negocios, pequeños en los que de cuatro empleados tres tuvieron que confinarse, y en grandes empresas que han visto cómo el 67% de su plantilla se daba de baja de golpe. Son ejemplos que puso Nicolás para reflejar la situación de estas últimas semanas.

No es de extrañar que sea de la opinión de reducir las cuarentenas por contagio de coronavirus: «a favor», dijo. «No digo que el que se encuentre mal se tenga que incorporar pasados esos días», aclaró, pero contrario a «dar días de baja por sistema».