Pedro Enrique Belmonte Giménez tiene una amplia carrera militar que comenzó como instructor de vuelo y mando del escuadrón de alumnos en la Academia General del Aire, donde estuvo de 1990 a 1997, fecha en la que, ya como capitán, pasó a ser piloto de F-18 en el Ala 15. Tras su ascenso a comandante se convirtió en oficial de Inteligencia del Cuartel General del Mando Aéreo de Combate (Macom), donde estuvo entre 2000 y 2005, año en el que regresó al Ala 15, como jefe de escuadrón. En 2008 ascendió a teniente coronel, siendo destinado al Estado Mayor del Aire. En 2011 fue destinado al Cuartel General del Comando de Componentes Aéreos Aliados para el Sur de Europa, como jefe Branch de ejercicios. Tras pasar por el Ala 15 como jefe de material, entre otros destinos, regresó al Macom, ya como coronel, donde ha permanecido hasta convertirse en el nuevo jefe de la Base Aérea de Los Llanos y del Ala 14.

¿Cómo ha encontrado la Base Aérea a su llegada?

Podemos hablar de diferentes ámbitos, si estamos hablando del estético podemos decir que realmente es una base preciosa, lo digo yo que vengo de Torrejón y de Zaragoza, está muy cuidada y además se nota el cariño de toda la gente que trabaja aquí, que es mucha. Si hablamos desde el punto de vista operativo creo que es una unidad que ha alcanzado un nivel operativo altísimo, los pilotos están al nivel más alto que se puede alcanzar. Tenemos diferentes niveles, están los pilotos que llegan y los máximos instructores y ahora mismo nuestra unidad podemos decir que está al máximo nivel operativo de las unidades de caza del Ejército del Aire. A nivel de personal todo el mundo está muy motivado, tenemos mucho personal que está aquí porque es de Albacete y ama Albacete y eso da un toque especial, porque consideran la base como algo suyo y les da una motivación extra. 

¿Qué le parece la labor de su antecesor en el cargo, Pablos Chi?

Ha hecho una labor extraordinaria y creo que el legado que recibimos cada uno de los coroneles que llegamos a la Base de Albacete es un legado importantísimo, él ya recibió un legado importante con una base extraordinaria, pero creo que él ha acrecentado esos niveles de operatividad, porque el sistema de mantenimiento del Eurofighter sigue progresando y sigue mejorando. Él ha contribuido a ello y a la motivación y la especialización de la gente. El coronel que llega ya da sus pautas y yo sólo puedo decir que me siento afortunado de como he encontrado la base a mi llegada.

El Ala 14 tenía previsto terminar 2019 con 31 Eurofighter, ¿están ya aquí esos 31 aparatos? ¿Falta por llegar alguno?

Actualmente tenemos 30 Eurofighter, aunque uno de ellos pertenece al Ala 11 de Morón, con lo que quedan por llegar dos aviones más. Está previsto que estos dos aviones lleguen en octubre o noviembre, pero quizás se pudiese demorar algún mes, pero creo que en octubre o noviembre tendremos la flota completa. En ese momento, en el que tengamos esos 32 aviones, deberemos devolver el avión que tenemos prestado del Ala 11 de Morón y nos quedaremos con la flota final que será de 31 aviones. Nosotros entendemos que a finales de 2019 tendremos la flota definitiva  de 31 Eurofighter asignada al Ala 14, que está previsto que esté aquí hasta que se den de baja los aviones.

¿Cuántos pilotos tiene actualmente el Ala 14?

Tenemos el número de pilotos apropiado para el número de aviones que tenemos, para realizar las horas de vuelo que tenemos asignadas y para que vayan teniendo los niveles de capacitación que necesitan para realizar los ejercicios y todas las misiones que nos piden. Quizá nos faltarían cuatro pilotos para completar esa plantilla idónea, cuatro pilotos serían bien recibidos para integrarlos en la operatividad de la Unidad. Pero tenemos unos números muy aceptables, aunque siempre se aspira a algo mejor, para quitar algo de carga de trabajo a los pilotos, que están bastante presionados. Para el funcionamiento ideal de la Base serían necesarios cuatro pilotos más.

¿Se espera que lleguen nuevos pilotos a la Base?

Normalmente las incorporaciones se hacen cuando se acaba la Academia y eso ocurre en verano, cuando llegaron dos pilotos nuevos. Por otra parte, todos los años aportamos a las escuelas pilotos ya formados y tras dos o tres años tienen la opción de retornar al origen, por eso ahora vamos a recibir otros dos pilotos que se marcharon hace tres años y que vuelven, con alta experiencia, pero hemos perdido pilotos que se han ido a las Academias. Los dos nuevos pilotos que recibimos hace dos meses de la Academia serán formados  en Morón, para tener dos nuevos pilotos de Eurofighter. El año que viene recibiremos entre dos y cuatro pilotos.

¿Qué plantilla tiene la Base Aérea actualmente?

Hay 808 personas, de las cuales 735 son militares y 73 son civiles.  

El coronel Juan Manuel Pablos Chi acometió la división del Ala 14 en dos escuadrones, ¿qué ha supuesto esta división?

El hecho de poner un comandante más al mando de un escuadrón supone que tenemos un piloto más completamente operativo, que se dedica solamente a labores operativas y esto ya es importante, porque cada uno de los pilotos es esencial para el funcionamiento de la unidad. Por otra parte, cuando tienes dos escuadrones se crean varias sinergias, la primera es que las personas o los pilotos  se sienten identificados con ese escuadrón, es como el sentirse de un equipo, lo que crea un instinto de superación con respecto al otro escuadrón. Hay una competencia sana entre escuadrones, que siempre beneficia a la instrucción y a la preparación. Además el hecho de que el jefe de escuadrón mande sobre una menor cantidad de gente, hace que se individualice más la formación, la instrucción y la adquisición de conocimientos y siempre son aspectos positivos.

¿Su trabajo como coronel continuará en esa línea?

Sí, por supuesto, vamos a continuar con los dos escuadrones, creo que es esencial que existan dos escuadrones, eso permite más flexibilidad también para nosotros, voy a seguir la misma línea, porque creo que es la acertada. 

¿Cuántos horas de vuelo acumulan ya los Eurofighter albacetenses?

Actualmente hemos llegado a las 18.500 horas y esperamos alcanzar las 20.000 horas de vuelo de los Eurofighter en el primer trimestre de 2020, que será un momento relevante en la unidad y que celebraremos adecuadamente. 

Eso da una idea de lo asentados que están ya los Eurofighter.

Por supuesto, el Ala 14 es una unidad puntera de la aviación de combate del Ejército del Aire y de referencia. 

¿Cuál ha sido la actividad de los Eurofighter durante 2019?

La verdad es que ha sido densa. Hemos participado en todos los ejercicios que hemos tenido a nivel nacional, de momento hemos estado en todas las activaciones que se han hecho de ejercicios más o menos grandes de la península. Hemos participado en el ejercicio Sirio, el más importante del Ejército del Aire. Hemos estado en el ejercicio Tormenta de lanzamiento de bombas en  Bardenas. Hemos desplegado como una base avanzada de despliegue en Zaragoza, hemos participado en exhibiciones, en el Volkel Airshow en Holanda y hemos hecho exhibiciones en las puertas abiertas de Getafe y en el Festival Aéreo de Motril. También hay que destacar que participamos en el sobrevuelo del día 14 de julio de Francia, sobre los Campos Elisios, por invitación de las Fuerzas Armadas Francesas. Además hemos contribuido a la defensa del espacio aéreo de soberanía con las otras tres unidades de combate en la península, que son Morón, Torrejón y Zaragoza (Ala 15, Ala 12 y Ala 11).

¿Está previsto que se vuelva a cruzar el Atlántico próximamente?

Sí, vamos a participar el próximo año, en la segunda o tercera semana de marzo, en el ejercicio Red Flag en Las Vegas, en los Estados Unidos y tendremos que cruzar el Atlántico. Es la segunda vez que participamos y aún no está definido cuantos aviones van a participar. Normalmente se llevan ocho aviones a este ejercicio. Se llevan ocho aviones para participar seis, siempre hay dos de reserva por si hubiera fallos mecánicos, pero todavía está por confirmar cuantos aviones tenemos que llevar. Vamos a liderar el Red Flag y si necesitamos algo nos apoyará el Ala 11, como nosotros les apoyamos a ellos, pero son apoyos puntuales.

La Base Aérea ha vuelto a colaborar en 2019 con las aeroevacuaciones  de helicópteros del Sescam y con los movimientos aéreos de la Organización Nacional de Trasplantes, ¿en cuántas ocasiones?

En lo que llevamos de año hemos realizado cuatro colaboraciones con el Sescam y cuatro con la  Organización Nacional de Trasplantes. Han bajado bastante los apoyos al Sescam, pero tiene su motivo y es porque al tener ahora un helipuerto, nos demandan menos apoyos, principalmente  en operaciones nocturnas, pero mantenemos una colaboración estrecha. 

Este año han participado por primera vez en los cursos del TLP aviones de quinta generación, ¿qué ha supuesto esto para la Base Aérea? ¿Qué va a suponer para el futuro?

Lo que conlleva es la importancia que supone para la Base Aérea de Albacete como Unidad de despliegue y de entrenamiento de aviones americanos. Además tengo que decir que fue un auténtico éxito y esto viene corroborado, porque nos van a visitar ahora 16 aparatos F-16 para el curso de noviembre del TLP, pero no sólo van a venir para realizar ese curso del TLP, sino que van a venir a volar con las unidades del Ejército Español, para entrenarnos entre todos con las diferentes unidades de combate de España. Vamos a tener una participación importante como Ala 14 con ellos y tendremos una relación fluida con ellos. Que nos elijan para entrenar con nosotros permite que todos ganemos, por una parte nos sentimos afortunados de que la Base satisfaga sus necesidades de instrucción y a la vez nosotros nos entrenamos con las tácticas de un país muy relevante en el combate.

¿Cuáles son sus objetivos para estos dos años al frente de la Base?

Primero cuidar el legado que me han dejado los predecesores, creo que hay una cosa muy bonita de un coronel que llega a la Base Aérea de Albacete y son las relaciones institucionales que tiene, por eso quiero mantenerlas al nivel exquisito que existe ahora. A nivel de lo que es la Base quiero contribuir con el pequeño grano de arena que aportamos todos los coroneles que venimos, tanto a nivel de infraestructuras, como de personal. Para mi es fundamental mejorar la vida del personal que trabaja aquí en la Base Aérea. El cuidado del personal es esencial para la operatividad de la Unidad.