El joven albacetense Julio Pérez presenta hoy jueves, a las 18,30 horas, su libro Al filo de la navaja, obra con la que invita hacer un viaje por el mundo de la navaja, en especial la clásica de Albacete, pasando desde su historia, procesos de elaboración y materiales, hasta los problemas en el sector o los versos de Juan José García Carbonell.

Jesús Ramírez Carboneras y Llanos García acompañarán al autor en el acto, con entrada libre hasta completar aforo. 

¿Cómo surgió la ocasión para publicar este libro?

La idea salió de un máster que estaba cursando en Valencia. Para el trabajo final quise mostrar algo en representación de la ciudad de Albacete, para presentarles algo que no conocieran allí.  

Como también me gustan mucho la fotografía y el diseño, decidí hacer una mezcla de disciplinas. Empecé tomando imágenes de una colección de navajas y lo que iba a ser un libro de fotografías acabó teniendo un poco de todo, porque también incluye textos sobre la historia de la cuchillería o poemas de Juan José García Carbonell. 

Cuando concluí el trabajo, me recomendaron que estudiara si podía publicarlo. Se lo comenté al gerente de Popular y esa opción ha salido para delante. 

¿Cuánto tiempo llevó y cómo enfocó ese proceso de recopilación de imágenes y datos?

Supuso unos seis o siete meses de trabajo. Lo hice en gran parte durante la pandemia, cuando tuve tiempo para poder hacer las fotografías de la colección de navajas, cedida por un amigo de mi padre que es coleccionista, que me dejó unas 25.

Una vez editadas las fotografías, comencé con las entrevistas a artesanos, que también me abrieron sus talleres para incorporar más fotografías. Transcribí esas entrevistas e incorporé información sobre el sector, como la estructura del gremio, los problemas a qué se enfrente o cómo se hacía la compraventa antes y ahora. Así, junto con los poemas de Carbonell, le fui dando forma.

En cuanto a la respuesta de quienes hayan podido leer el libro ¿qué es lo que más les ha sorprendido sobre esta tradición de Albacete?

Lo que más llama la atención son las fotografías de navajas, que al final creo que es el punto fuerte del libro, sin desmerecer al resto del contenido.

Además, son muy variadas, con diferentes tipos, tanto de fondos de imagen como de navajas. En la colección hay seis o siete formas de hojas, así como mucha variedad en los materiales de los mangos, como cuerno de ciervo o de venado, de nácar, de madera o una chapada en oro, que llama mucho la atención. 

Por lo que ha aprendido en el proceso, ¿cree que conocemos bien la historia de nuestra cuchillería?

Depende de con quién hables claro. Por supuesto que la conoce bien la gente con la que yo he tenido que hablar, cuchilleros o artesanos que llevan mucho tiempo en este. Por ejemplo, de Expósito, dicen que es el mayor referente de España en la fabricación artesanal de navajas y conoce la historia de sobra. 

En cuanto al resto de la sociedad, sí que hay mucha gente que no conoce desde cuándo se fabrican las navajas, creo que desde el siglo XV, o los tipos de procesos de fabricación y de navajas. 

Por último, ¿qué puede contarnos de sus acompañantes en la presentación?

Jesús Ramírez Carboneras es el coleccionista que me prestó las navajas, uno de los hijos de los artesanos Ramírez que ya hacían navajas hace décadas en Albacete.  Además, su hermano es una de las personas que entrevisté y creo que Jesús puede aportar muchos detalles, tanto de la historia de las navajas como del proceso de creación del libro, ya que he hablado en numerosas ocasiones con él.  

Llanos García es una amiga que se ofreció a ayudarme, porque había trabajado anteriormente en la librería y tiene experiencia en otras presentaciones, lo que creo que me puede venir muy bien ya que es la primera vez que hago algo así.