Con la jornada 36 finiquitada, la 37 se prevé de infarto, ya que puede ser definitiva para proclamar al campeón de la Liga 2020-21. El Atlético de Madrid dispone mañana en su feudo del Wanda Metropolitano del primer ‘match ball’ por el título, pues con un triunfo ante Osasuna y un pinchazo del Real Madrid en San Mamés ante el Athletic Club certificará matemáticamente la undécima corona liguera de su Historia.

La jornada intersemanal acercó al equipo rojiblanco a la gloria, mantuvo a los merengues en la pugna, alejó al Barcelona casi definitivamente y anuló las escasas opciones que tenía el Sevilla que, no obstante, mantiene intactas las de mejorar la cuarta plaza.

El conjunto colchonero salió reforzado del Camp Nou, donde ganó sensaciones para volver a sentirse favorito al título y las confirmó en una gran primera parte en el Wanda Metropolitano ante la Real Sociedad. Pudo marcharse goleando al descanso. Lo hizo con clara ventaja, gracias a los tantos de Carrasco y Correa, pero su triunfo en la primera de las tres finales que le quedan, no podía llegar sin sufrimiento.

Siempre decisivo Oblak con sus paradas salvadoras y un final apretado que queda en el olvido cuando ve un paso más cerca el deseado título. Con dos encuentros por disputarse, la escuadra de Diego Pablo Simeone tiene el título en sus manos.

Dispone de dos puntos de ventaja sobre el conjunto de Zinedine Zidane y cuatro sobre el de Ronald Koeman, que necesita el tropiezo de los dos equipos madrileños y alcanzar el pleno.

Le queda un Osasuna que no se juega nada y un capítulo final de pura emoción en Valladolid ante un rival que se jugará su continuidad en LaLiga Santander. La penúltima jornada de Primera División se disputará íntegra mañana, en horario unificado, a las 18,30 horas, con el Atlético como líder con 80 puntos, dos más que el conjunto merengue y cuatro más que el azulgrana. Los culés pueden quedarse matemáticamente fuera de la lucha del título, pero no así los blancos, que aún pueden presentar batalla y que se decida todo en la última.

El bloque colchonero es el único de los tres aspirantes que no tiene que mirar a los otros dos. Las posibilidades son múltiples, pero la más sencilla es apostar por la idea del ‘partido a partido’: si ganan los dos partidos, serán campeones.

Les vale también con una victoria, dos empates o incluso dos derrotas si no ganan los otros dos.

Así, el conjunto de Diego Pablo Simeone se proclamarán campeones si ganan a Osasuna y el Real Madrid no gana al Athletic. En caso de empate o victoria blanca en San Mamés, tendrán que esperar al siguiente domingo.

Entrega del trofeo

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) entregará el trofeo de campeón de Liga al Atlético de Madrid mañna si logra alzarse con el título de Primera División, según ha informado el ente federativo, cuyo presidente, Luis Rubiales, no podrá asistir al palco del Wanda Metropolitano al haber comprometido su presencia en la final de Copa de fútbol sala.