El primer once de Rubén Albés fue poner sobre el campo a lo mejor que tiene en estos momentos en la plantilla, que evidencia la falta de recursos al tener prácticamente todo el banquillo cubierto de jugadores del filial.

Albés utilizó un clásico 4-4-2 a la hora de defender, pero que es convertía en un 4-2-3-1 en ataque, con Sergi García como falso nueve, posición que intercambiaba con Fuster, que estaba en la mediapunta, o incluso con el hispanobelga Dubasin, que jugó como extremo zurdo, mientras que por la izquierda estuvo Rubén Martínez. Riki y Fran Álvarez ocuparon el centro del campo, mientras que atrás, con Bernabé en la portería, la defensa quedó con Álvaro Rodríguez, Djetei, Boyomo y Julio Alonso.

El Mestalla de Miguel Ángel Angulo pegó primero, en un clamoroso error a la hora de sacar el balón controlado desde atrás y dar Riki un pase al contrario que aprovechó Alberto Marí para hacer el 0-1 en el minuto siete. Poco le duró la alegría al filial valenciano, pues en el ocho un gran pase de Fran Álvarez habilitó a Sergi García en la derecha y el espigado jugador puso un gran centro al punto de penalti que Manu Fuster aprovechó para, de cabeza, empatar el partido, con más de un millar de aficionados en las gradas de la Ciudad Deportiva.

En el parón de hidratación Emmanuel y Juan Marías Alcedo entraron por Álvaro Rodríguez y Manu Fuster y poco más se pudo ver en la recta final de la primera parte.

El Mestalla cambió a todo el equipo tras el descanso y quizás por eso pasó a dominar con claridad el encuentro, pues en el Alba entraron el guardameta Altube, Marc Llinares, Javi Vargas y Willy. Poco después entró Chillerón por Fran Álvarez, varios canteranos que evidenciaron falta de acoplamiento al primer equipo.

El caso es que la banda derecha, con Gozálbez e Ismael, fue una pesadilla para un Albacete que apenas logró pasar del centro del campo durante muchos minutos. Un contragolpe propició una buena jugada del Mestalla, que, con calidad, anotó por medio de Diego López. El dominio del Mestalla fue total, ante un Albacete con más de medio equipo de canteranos, lo que evidencia la falta de efectivos en la plantilla.

El partido acabó con la expulsión de Pau Resta por sujera a un Gozálbez que se marchaba solo ante Altube, que poco antes había detenido un mano a mano con Joaquín que podía haber significado el tercer gol para los visitantes.