Francisco J. Martínez

CARTA DEL DIRECTOR

Francisco J. Martínez


Moverse en la ciudad

25/09/2022

El calendario marca desde hace unas décadas que, una vez concluida la Feria de Albacete, es hora de resetearnos para adecuarnos a la cotidianidad y concienciarnos de la forma en que nos movemos con la llegada de la Semana de la Movilidad. Este año llegó de forma distinta después de la peatonalización de la Calle Ancha.
Sin duda, este cambio varió de forma fundamental el tráfico de la ciudad. Superado ya el debate sobre la idoneidad de ganar espacios para el peatón en las calles del centro, en la primavera pasada se puso sobre la mesa las consecuencias que trajo consigo tal medida. En este aspecto, todavía hay debate entre los ciudadanos sobre los cambios de sentido de determinadas calles o la ausencia de circulación rodada en la Calle Ancha. En la mayoría de los debates, las conclusiones suelen ser que si bien la peatonalización ha sido positiva -y todavía no se perciben las consecuencias a medio y largo plazo, sobre todo en el área comercial y de ocio-, las rutinas de los conductores cambiaron y hay momentos en los que el tráfico es bastante denso alrededor de la almendra central que se ha formado. Esta alta concentración de vehículos enerva a los conductores.
Llegados a este punto, me pregunto si la cuestión no es la peatonalización, ni el tráfico denso... Creo que es el excesivo uso que hacemos de los automóviles. Sí, Albacete es una ciudad llana, excesivamente llana, idónea para moverse a pie o en bicicleta, o incluso ahora en monopatín eléctrico. Si usáramos menos los coches particulares, seguro que se reducirían los embotellamientos y la ciudad sería más amable para sus habitantes y visitantes.