El complicado reto de llegar desde abajo

C. de la Blanca (SPC)
-

El complicado reto de llegar desde abajo - Foto: Alberto Martín

Luis de la Fuente tiene por delante varios retos al cargo de la selección absoluta. El primero, de índole claramente deportiva: clasificar a España como primera de su grupo para la Eurocopa de Alemania'24. El segundo, consolidar a un grupo de jugadores muy joven que, en su mayoría, él ha dirigido en las categorías inferiores en los últimos años. Y tercero, hacer olvidar el último precedente de un entrenador que llegaba desde la sub'21 y se hizo cargo del equipo.

Iñaki Sáez era el último técnico que escaló hacia la cima del conjunto nacional llegando desde abajo hasta ayer. Su currículum le avalaba como un preparador de garantías, el cual había engrosado gracias, en parte, al gran éxito del fútbol español en categorías inferiores: el Mundial sub'20 de 1999. En aquella plantilla, que se impuso en la final a Japón con claridad (0-4), había nombres ilustres como el de Íker Casillas, Xavi Hernández o Carlos Marchena; quienes serían campeones del mundo 11 años después en Sudáfrica.

Con esa vitola de gran conocedor de gran parte del plantel y con el éxito de aquella Copa del Mundo sub'20 fue presentado Iñaki Sáez, justo después de la eliminación en Corea y Japón'02. José Antonio Camacho decidió no continuar al cargo del equipo.

En el camino a la Eurocopa de Portugal'04 se cruzó Grecia. La Roja no pudo obtener el primer puesto en un cuarteto, en principio, bastante asequible, por lo que fue condenada a disputar una repesca siempre complicada, aunque el conjunto la superó contra Noruega.

El hecho de jugar el 'play-off' ya había puesto en el disparadero a un Iñaki Sáez que continuó sembrando dudas en la fase final. España, encuadrada en el Grupo A, venció por la mínima a Rusia con un gol de Valerón, empató a uno frente a Grecia y se jugó el pase a cuartos de final contra la anfitriona. Un tanto de Nuno Gomes en la segunda parte acabó con la participación de la Roja a las primeras de cambio.

Aquella decepción se 'cargó' a un Iñaki Sáez que quería mantenerse en el cargo. Sin embargo, la Federación Española de Fútbol acabó por cesarlo y traer en su lugar a Luis Aragonés. Lo demás es historia del fútbol nacional.