«Importa que el emprendedor no tenga miedo a equivocarse»

Antonio Díaz
-

La empresaria y autora Bisila Bokoko, fundadora y directora ejecutiva de BBES, consultora empresarial con sede en Nueva York, visitó Albacete para presentar su libro Todos tenemos una historia que contar

Bisila Bokoko, fundadora y directora ejecutiva de BBES. - Foto: Arturo Pérez

La empresaria y autora Bisila Bokoko,  fundadora y directora  ejecutiva de BBES, consultora empresarial con sede en Nueva York, visitó Albacete, invitada por la Asociación Cultural y Social Alborea, para presentar en el Casino Primitivo su libro Todos tenemos una historia que contar y habló con La Tribuna de Albacete sobre esta obra.

¿Todos tenemos una historia que contar?

Estoy totalmente convencida. Las historias de otras personas nos inspiran y, desde mi punto de vista, todas las historias son importantes, las de nuestros ancestros o las de los que nos rodean, escuchemos esas historias.

En el libro, ¿nos habla de esas historias tan importantes?

Primero empiezo el libro contando de dónde vengo y cómo muchas veces, la diversidad es un tesoro. Hablo de eso y también de historias de las dificultades y todas las vallas que he tenido que saltar en mi carrera, porque todos tenemos muchas vallas que saltar. También, está muy orientado a la gente joven, cuando están en un período de duda, cuando pasa ese momento que acaban sus carreras y no saben muy bien cuál es su misión y su futuro, por eso les doy una serie de  tips, de cómo pueden salir de esa parte de duda. Hablo igualmente de cuando uno conoce el éxito profesional y cómo puedes caer del éxito profesional. En mi caso tuve éxito profesional  muy joven, con la arrogancia que eso supone, y cómo caes   y qué puedes hacer cuando esto sucede y qué tipo de reflexiones tienes que hacer. Cómo conciliar la familia y el trabajo y emprender, de lo que hablo mucho, y cuáles son las claves para emprender con éxito. Es decir, repaso diferentes temas que han sido mis historias.  

¿Nos puede dar algún consejo para emprender?

Pues sí. Yo pienso que para emprender, sobre todo, es importante rodearte de personas que sepan tener buenos mentores. Muchas veces el emprendedor piensa que lo puede hacer todo solo, pero se olvida a veces de que hay que tener un plan, que es importante que esté vivo. Yo he fracasado en algunos planes empresariales porque no he sabido adaptarme a las incertidumbres y cómo vienen, no he sabido pedir ayuda. Creo que es muy importante que el emprendedor sepa pedir ayuda y que no tenga miedo a equivocarse y también, que no estigmatice el fracaso, que no abandone. Creo que en España todavía nos falta esa tolerancia al fracaso, que entendemos como demasiado grande y, sin embargo, forma parte de un aprendizaje más.  

¿En cuanto a los jóvenes?

Para empezar, que aunque están en ese proceso que no saben exactamente lo que quieren hacer, que no se sientan mal. Yo no tuve una situación en mi vida en la que tenía todas las claves y las respuestas. La misión, es algo que muchas veces te va encontrando y también les digo que tengan sueños grandes y pasos pequeños, el camino se hace andando. Lo más importante no es el destino, es el camino.

¿Cómo se ve esa situación de ser una de las 10 mujeres españolas más influyentes en el mundo de los negocios?

Creo que fue algún periodista que me apreciaba mucho que dijo esto. No sé muy bien de dónde sale. A las personas que nos dan este tipo de titulares pienso que también es para que seamos referencias para otros, porque todo el mundo sabe que todos podemos llegar ahí. Yo empecé como hija de emigrantes, ya que mis padres vinieron a este país para buscarse la vida y considero que eso también te da ese sentido del deber, por eso mentorizo a otras personas y lo veo desde el punto de vista de la humildad. Uno puede estar arriba, pero también pude estar abajo y es siempre importante volver a los orígenes. Hablo del tener y del ser; tener ese título de mujer importante, no es quien soy.  Soy una persona como todas, vulnerable, a veces tengo inseguridad, he tenido el síndrome del perfeccionismo y tengo la misma vulnerabilidad que cualquier otra mujer que quiera emprender.  

¿Cómo funciona ese programa de alfabetización que emprendió en África?

Para mí ha sido muy importante, porque si yo he conectado con mis raíces africanas, ha sido por mis abuelos. Yo nací aquí y tenía ese choque cultural entre África y España y cuando fui a África por primera vez tenía 35 años. Fui a Ghana, primero, no a Guinea Ecuatorial, que es el país de origen. Me di cuenta que la llave que abre todas las puertas es la educación y estos niños no tenían las oportunidades que yo he tenido, y pensé que los libros te pueden abrir mucho conocimiento y consideré que los niños podían conocer el mundo a través de los libros y el proyecto comenzó así y ha ido creciendo.