El deporte rural vasco regresó a la Feria de Albacete con una exhibición de fuerza, destreza y, sobre todo, tradición. El deporte rural vasco es muy peculiar y así lo pudieron comprobar los centenares de personas que agolparon en la explanada del Pincho de la Feria para presencia todo un espectáculo, sobre todo cuando llegó el turno de los levantadores de piedras, sin olvidar a los aizkolaris cortando troncos a una velocidad increíble. Una exhibición que hizo las delicias a pequeños y grandes.