El Albacete Balompié quiere cerrar una semana intensa con un triunfo en el Carlos Belmonte, algo que no hace desde que a finales de agosto derrotó al Huesca (2-1). Desde entonces, una derrota y dos empates han sido sus resultados, en partidos marcados por expulsiones, penaltis en contra y goles en los minutos finales.

Por todo ello el técnico quiere un partido normal y derrotar al Real Oviedo, que viene con su técnico, Jon Pérez Bolo, con la soga al cuello. La trayectoria del equipo asturiano deja mucho que desear. Aunque no sabe lo que es perder como visitante, lleva siete jornadas sin ganar y el crédito de su entrenador está agotado. Su puesto estará presumiblemente en juego y lo afronta con numerosas bajas.

El Oviedo ha viajado sin Koba, Miguelón y Dani Calvo, más las bajas añadidas de Sangalli, lesionado en La Romareda, y David Costas, que se cayó de la lista por un golpe en las cervicales. La única buena noticia es la vuelta de Borja Sánchez. Casi una decena de lesiones musculares lleva el cuadro ovetense desde que empezó la temporada y visita el Belmonte metido ya en zona de descenso.

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