La Universidad de Castilla-La Mancha ponía en marcha en el curso 2020/21 la iniciativa, 'UCLM Rural. Universitarios ante la despoblación' en colaboración con las Diputaciones Provinciales de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo con un doble objetivo, por un lado, acercar a los jóvenes a otros entornos, y por otro, promover el empleo, combatir la despoblación fomentando la realización de prácticas en grandes empresas, pymes, microempresas, empresas de economía social, entidades del tercer sector y otras instituciones públicas y privadas ubicadas en localidades de Castilla-La Mancha de menos de 5.000 habitantes.
Metidos de lleno ya en la segunda edición, detrás de 'UCLM Rural' lo que hay son prácticas externas remuneradas a las que, por otra parte, según recuerda la vicerrectora de Innovación, Empleo y Emprendimiento, Ángela González Moreno, pueden optar los estudiantes de cualquier titulación oficial y de esta forma «no sólo poder completar su formación sino también conocer en profundidad el medio rural, residiendo allí, conviviendo y colaborando con sus gentes, en definitiva, sintiéndolo como un lugar de oportunidades para el desarrollo del que será su futuro profesional».
El 31 de diciembre es la fecha tope establecida por la Universidad regional para el disfrute de estas prácticas becadas con 500 euros brutos mensuales y otros 500 euros más para aquellos estudiantes empadronados en una localidad diferente a la de realización de prácticas en concepto de gastos de manutención, alojamiento y desplazamiento, sumando un total de 1.000 euros. Además, según reza en la convocatoria de esta segunda edición, la ayuda económica por estas prácticas es compatible con otra ayuda que el universitario en cuestión pueda obtener de la empresa o de cualquier otra entidad o institución.
De cara a su concesión, al margen de que ésta se lleva a cabo en régimen de concurrencia competitiva, se tendrá en cuenta tanto el perfil que se esté demandado como la nota media del estudiante, «de manera que, a mejor nota, más posibilidades tendrá de elegir su destino pues las empresas e instituciones son las que proponen el lugar pero son los estudiantes en cuestión los que elegirán a donde quieren ir los tres meses que dura esta iniciativa», apunta Ángela González Moreno.
Para ser becario de 'UCLM Rural. Universitarios ante la despoblación', no obstante, si uno es estudiante de Grado, deberá haber superado, indica la vicerrectora, el 50 por ciento de los créditos del plan de estudios del curso en el que se encuentre matriculado, no así si el estudiante lo es de un máster oficial, correspondiendo, por otra parte, a una comisión compuesta por varias personas seleccionar, entre todos los que opten, a los beneficiarios. Las solicitudes deben presentarse ante el CIPE presencialmente o de forma digital, siendo en su mayoría entregadas por estudiantes de último curso, aunque también los hay de cuarto año e incluso de tercero y proceden de estudios tan variados como Derecho, Administración y Dirección de Empresas, Humanidades, Economía, Educación, Farmacia o de las diferentes Ingenierías y si bien, apunta Ángela González, en la primera edición ningún solicitante de estas becas de prácticas externas en el medio rural estudiaba Medicina o Enfermería, en la segunda, por contra, sí que los ha habido.
A finalizar el 31 de diciembre, como se ha mencionado, viene a ser, no obstante, el verano cuando más becarios hay, dándose, por otra parte, la circunstancia de que el mes en el que estamos han empezado varias de estas becas.
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