La mayoría socialista en las Cortes ha dado luz verde a la Ley de Medidas Urgentes de Agilización y Simplificación de Procedimientos para la Gestión y Ejecución de los Fondos Europeos de Recuperación. Una norma que, a grandes rasgos, pretender, reducir la burocracia en la gestión del dinero que en unas semanas comenzará a llegar de Bruselas.

El consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha defendido ante el pleno que esta ley es «fundamental para poner a punto la maquinaria administrativa de la Junta, a fin de poder tramitar y ejecutar el importante volumen de recursos europeos que nos llegará en los próximos años». No obstante, sus palabras no han calado en el ánimo de la oposición, que ha mantenido, como era de prever, su rechazo al texto. 

Se convierte así en la primera ley anticovid que no cuenta en Castilla-La Mancha con el apoyo de Ciudadanos, firmante del pacto por la reconstrucción regional. Es más, en este caso concreto, es el partido más beligerante contra esta norma, a la que acusa de falta de transparencia.

Este jueves se han repetido línea por línea los argumentos esgrimidos ya en el debate sobre la enmienda a a la totalidad presentada por Ciudadanos contra esta ley, celebrado hace apenas 15 días. 

Así, desde Ciudadanos se ha vuelto a criticar que esta norma prime la adjudicación negociada sin publicidad, un trámite que la propia UE «ha puesto en el punto de mira»; los convenios de colaboración,  en duda por el Tribunal de Cuentas; y  las subvenciones de adjudicación directa, o «dedo», tal y como las ha calificado el portavoz naranja, David Muñoz. «Quieren convertir estas medidas extraordinarias en lo ordinario», ha denunciado.

Además, la formación naranja ha defendido hasta el final su idea de crear de una agencia independiente «de tecnócratas» para la gestión de estos fondos.

El PP ha sido en este caso  más tibio que Ciudadanos en sus criticas, centrándose en insistir en que esta ley «nos deja más sombras que certezas».

El Gobierno regional tampoco se ha salido del guión, insistiendo en el carácter técnico de esta norma. Como ha apuntado Ruiz Molina,  «no limita los controles, ya que seguirán vigentes los internos existentes de la propia Administración y los externos, de otras instituciones públicas, además de los establecidos por la propia Comisión Europea".

El PSOE es el único que se ha desviado ligeramente de lo dicho hace dos semanas, en un intento de reconducir el pacto con Ciudadanos con la ‘oferta’ de varias enmiendas transaccionales. No obstante, el presidente del Grupo Socialista, Fernando Mora, ha dejado patente que la enmienda a la totalidad presentada por la formación naranja dolió, y mucho. Es más, en su discurso de cierre Mora ha dejado entrever que se podría haber alcanzado un acuerdo con los de Arrimadas si no hubiera habido esta enmienda de por medio.