Poco antes de las 22 horas, tras más de un día y medio de deliberación los nueve componentes del jurado seleccionado para el juicio por el crimen de Jairo Roland Arcos, han declarado culpable de asesinato al policía local procesado por su muerte. Los miembros del jurado han tomado esta decisión por unanimidad. «En base a las diligencias expuestas en el juicio por los diferentes agentes de la Policía Nacional y las pruebas periciales expuestas en el juicio observamos que mataron a la víctima utilizando medios y formas para la consecución de la misma y evitando la defensa, siendo un ataque sorpresivo e inesperado».

El jurado también se ha manifestado contrario por unanimidad a que se suspenda la pena de prisión o a que se solicite un indulto para el procesado. Por otra parte, el jurado tampoco ha considerado que existieran las atenuantes de dilaciones indebidas o la de confesión o la de arrebato u obcecación, puesto que no creen que el acusado actuara asustado o amedrentado. 

Otro acusado. En cuanto al otro procesado, primo del policía local responsable de la muerte de Jairo Roland Arcos, también lo consideran culpable del delito de encubrimiento del que estaba acusado.

Los nueve miembros del jurado, también de forma unánime, consideran que J.P.R. ayudó de forma «consciente y voluntaria» a su primo a deshacerse del cuerpo tirándolo al río, para evitar que el hecho fuera descubierto. 

En este sentido, el jurado ha estimado que aunque según la declaración del principal acusado en el juicio no le ayudó a tirarlo al río, el jurado vio «indicios de lo contrario, por las contradicciones que hay en las declaraciones de J.P.R.», concretamente entre lo que dijo el 9 de septiembre de 2018 y lo que contó en el juicio. 

Tampoco han considerado que fuera merecedor de que se le suspendiera la pena, ni de un indulto, algo que también se ha decidido por unanimidad.

En la vista, el fiscal ha mantenido su petición de 20 años de prisión para el policía local como responsable de un delito de asesinato y la pena de tres años para el otro procesado, como autor de un delito de encubrimiento. Por su parte, los dos letrados de la acusación particular, Emilio López y David Medrano, también han mantenido su petición de 25 años de prisión por asesinato para el principal procesado y la pena de tres años para el primo de éste por encubrimiento.

Tanto el fiscal, como las acusaciones particulares se han mostrado contrarios a la posibilidad de que se suspendiera la pena.

Por su parte, el abogado defensor del principal imputado, Mariano López Ruiz, ha solicitado a la magistrada que impusiera a su cliente la pena mínima por asesinato, de 15 años de prisión y el letrado del otro procesado ha pedido que se le impusiera una pena de seis meses de cárcel y la suspensión de dicha pena, puesto que su cliente carece de antecedentes penales.

El juicio ha quedado visto para sentencia, con lo que ahora será la magistrada presidenta la que imponga la condena a los dos acusados.