Fernando Lussón

COLABORACIÓN

Fernando Lussón

Periodista


A esperar la resaca

24/12/2022

El Gobierno de coalición ha culminado esta semana el maratón para aprobar el conjunto de leyes y proyectos legales que originaban roces entre las dos patas del Ejecutivo. La intención declarada era dejar cerrado el capítulo de las leyes que más convulsión han originado y dar vía libre a las que forman parte de la esencia del pacto de coalición. La carrera ha supuesto la aprobación en distintas fases de diecisiete leyes entre las que se han tramitado en el Congreso y el Senado.

La más importante, sin duda, por cuanto es el armazón de la acción política del Ejecutivo, ha sido los Presupuestos Generales del Estado, los terceros consecutivos, a lo que hay que añadir el establecimiento de nuevos impuestos a las grandes compañías que se han visto beneficiadas por el alza de los precios de la energía como consecuencia de la guerra de Ucrania.

Sin embargo, otras leyes aprobadas o que continúan su tramitación van a dejar una resaca cuyas consecuencias indeseadas por el Gobierno, es aún pronto para medir. La aprobación de la reforma del Código Penal con la desaparición del delito de sedición, sustituido por el de desórdenes públicos agravados y la rebaja de las penas en determinados casos del delito de malversación puede dar lugar a que se vean beneficiadas personas sobre las que pesa un gran reproche social. Esa es una posibilidad que puede suceder, a pesar de que la reforma está hecha con nombre y apellidos con el fin -dice el Gobierno- de favorecer la convivencia en Cataluña. Por el contrario su efecto más positivo puede ser que se facilite la extradición del expresidente catalán, Carles Puigdemont.

También están por ver las consecncias de la "ley Trans" aprobada en el Congreso y que seguirá su tramitación en el Senado, por cuanto hay informes y experiencias de otros países en los que los derechos que se han conceden a las personas transexuales están en revisión. La ley ha sido aprobada tal y como salió del Miniserio de Igualdad a pesar de que la parte socialista hizo el amago de enmendarla para situarse al lado del feminismo clásico, que no comparte los postulados queer, y que prefería un mayor control judicial de la posibilidad del cambio de sexo. Cuando tanto motivos y enfrentamienos ha habido entre los dos socios de gobierno, PSOE y UP, esta ley es la que ha estado más cerca de causar la ruptura del gobierno de coalición, además de producir una quiebra interna en el PSOE.

Si el propósito de Pedro Sánchez era llegar al próximo año con la agenda vaciada de conflictos en el seno del Gobierno, quizá no logre su propósito por la afición de UP a tensar la cuerda y aparecer como la parte que hace que se produzcan los avances sociales. Aunque han rebajado sus pretensiones en la ley de bienestar animal ahí están las leyes de vivienda y "mordaza" para mantener la tensión pero sin llegar a la ruptura que tendrán que dejar para después de las elecciones autonómicas y locales,

La gran resaca que todavía está por pasar es la de la renovación del tercio de magistrados del Tribunal Constitucional que tiene el mandato caducado. El Gobierno y sus socios parlamentarios están dispuestos a que se cumpla la legalidad modificando las leyes del TC y del CGPJ por una vía mas adecuada que en el anerior intento. Pero en este caso la resaca también afectará al PP porque cada vez se hace más evidente que busca una politización de la justicia que le favorezca.