Formarse para el empleo en Cáritas Diocesana

I.M.
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Cuentan con alumnos de todas las edades y condiciones y lo mismo que enseñan sobre cómo atender a un dependiente lo hacen en cómo llegar a ser trabajador de la restauración

Alumnos de uno de los cursos que se imparte en la sede de Cáritas. - Foto: Cáritas Diocesana

Hace unos días arrancaba en la sede de Cáritas Diocesana un curso de formación centrado en la atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales como residencias y centros de día de 490 horas y previamente lo habían hecho otros dos más, uno centrado en la cocina de 740 horas y el otro en operaciones básicas en restaurante y bares de 250 horas. Más adelante, en febrero lo hará otro igualmente de especialización profesional con prácticas en empresas y centrado en la atención sanitaria de 165 horas y finalmente en marzo, otro sobre operaciones básicas en cocina de 310 horas.

Todos estos cursos tiene en común ya no sólo que las horas formativas son presenciales sino también que el número de plazas disponibles por acción es de 15. Además, todos ellos, salvo el de especialización profesional, conlleva la obtención del consiguiente certificado de profesionalidad sea de nivel dos o de nivel uno, como el básico de cocina. 

Tienen lugar tanto en Cáritas Diocesana en el caso de los relacionados con la sanidad como en la Escuela de Hostelería El Sembrador en el caso de los relacionados con la restauración, según explica la coordinadora del programa de empleo y de formación de Cáritas, Cristina Galletero, y el requisito que se pide a quien asista a los de nivel dos es que tenga o bien los estudios de ESO o bien el examen de competencias básicas de nivel dos o el certificado de profesionalidad de nivel uno de la misma familia profesional. Otra cosa son los cursos de nivel uno para los que, por contra, no se pide requisito alguno. 

Los hay que se celebran en horario de mañana pero también los hay que se celebran en horario de tarde, y el profesorado que los imparte, además de estar homologado por la Junta y ser contratado por Cáritas, son expertos en la materia. Y el fin último de todas estas acciones no es otro que «capacitar profesionalmente a quien acuda para que luego encuentren trabajo», no en vano, las inserciones laborales que ha habido son 108.

En estos momentos hay cuatro cursos de marcha, dos en Cáritas, uno de mañana y otro de tarde, y otros dos en la Escuela de Hostelería y sólo el pasado año, según explica Galletero, la formación de Cáritas llegó al centenar de alumnos gracias a los siete cursos que celebraron a una media de 15 alumnos por curso. Totalmente gratuitos, cuentan alumnos de ambos sexos y de edades de lo más variado y asimismo lo mismo que los hay con dificultades para encontrar un trabajo, los hay que acuden hasta esta formación para reclicarse.

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