Los castellano-manchegos, de los que menos van a hospitales

J.A.J
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La región es la tercera de España con menos ingresos hospitalarios, con 8.574 altas por cada 100.000 habitantes, unas 2.000 menos que la media. Cuenca y Ciudad Real sí la superan

Los castellano-manchegos, de los que menos van a hospitales

Tendremos nuestros problemas de salud, pero si nos comparamos con el conjunto de España, no podemos quejarnos. Castilla-La Mancha es la tercera comunidad autónoma con menos ingresos hospitalarios del país, según recoge el último estudio sobre morbilidad hospitalaria elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El INE llega a esta conclusión con su última Encuesta de Morbilidad Hospitalaria, que mide con datos del 2017 aspectos como los ingresos hospitalarios y su duración y causas, entre otros.  A la hora de comparar la diferente situación entre comunidades autónomas, el organismo elabora una tasa de morbilidad, el número de altas hospitalarias tras un ingreso por cada 100.000 habitantes, teniendo en cuenta las hospitalizaciones dentro de cada región. Y, de este modo, resulta que Castilla-La Mancha presenta unas 8.574 altas por cada 100.000 habitantes, frente a las 10.449 del conjunto de España. Por debajo de la región castellano-manchega, sólo se sitúan en esta tasa de morbilidad la ciudad autónoma de Ceuta (7.588 altas) y Andalucía (8.306). Por contra, la mayor tasa de morbilidad se registra en las autonomías de Cataluña (12.176), Aragón (11.867) y Baleares (11.737).

Si vemos esta tasa de morbilidad  por hospitalización dentro de cada provincia de la región, llama la atención que sea más alta en las dos situadas al Sur. Ciudad Real presenta una tasa de 10.506 altas hospitalarias  por cada 100.000 habitantes, y Albacete de 10.435. Por contra, las tres provincias limítrofes con Madrid tienen altas en sus respectivos hospitales menores que la media regional. En Guadalajara se sitúa en 7.813 por cada 100.000 habitantes, en Toledo en  7.121, y en Cuenca en 6.875.

Otro aspecto en que Castilla-La Mancha es en el que Castilla-La Mancha lidera es el de hospitalizaciones en centros públicos. De hecho, esta región es la primera en este aspecto, con un 93,1 por ciento de altas hospitalarias desde centros públicos y sólo un 6,9 por ciento en privados. El total de altas hospitalarias registrado en la región fue de 174.308 en un año.

Por detrás de la región, se sitúan con los mayores porcentajes de altas efectuadas desde hospitales públicos Extremadura, con un 92,2 por ciento, y Castilla y León, con un  88,7 por ciento. Por contra, el menor porcentaje de altas desde un hospital público se dio en Cataluña, comunidad conocida por su proverbial propensión a los conciertos entre su Sanidad Pública con clínicas privadas, con un 50 por ciento. La siguen Baleares, con  un 63,6 por ciento; Canarias, con un 64,8 por ciento; y Madrid, con un 66,5 por ciento. En el conjunto de España, un 72,5 por ciento de las  altas hospitalarias tuvo lugar desde centros públicos, mientras el 27,5 por ciento restante se efectuó en clínicas privadas.

cuestión de edad. Una observación cotidiana que confirma la Encuesta de Morbilidad Hospitalaria es que el ingreso en un hospital    está relacionado, fundamentalmente, con la vejez. Los tramos de edad donde se concentran un mayor número de hospitalizaciones son los de 75 a 84 años (32.403 altas registradas), 65 a 74 años (25.930), y 55 a 64 años (20.462). Por contra, los segmentos con menor número de hospitalizaciones son los de uno a cuatro años (3.331 altas hospitalarias registradas), cinco a 14 años (4.753), menores de un año (5.306), y de 15 a 24 años (7.478).

Algo más de las altas hospitalarias en la región correspondieron a mujeres, unas 90.226, mientras los hombres supusieron unas 84.082. Aún así, en la encuesta se advierte que los datos femeninos están mediatizados por la asistencia hospitalaria en embarazos y cuestiones relacionadas.

En el conjunto de España, se dan proporciones parecidas. Por  sexo,  las  altas  hospitalarias  aumentaron  un  1,0 por ciento  en  el  caso  de  los  hombres  y descendieron un 0,2 por ciento en el de las mujeres (si se excluyen las complicaciones del embarazo, parto y puerperio ascendieron un 1,1 por ciento). Más de la mitad de las altas  correspondieron a mujeres (52,3 por ciento). No obstante, si se excluyen las producidas por embarazo, parto y puerperio, este porcentaje se situaría en el 47,4 por ciento. Por  grupos  de  edad  el  mayor  número  de  altas  correspondió  al  intervalo  de  65  a  84  años (33,3 por ciento del total) seguido del grupo de 45 a 64 años (23,4 por ciento).