Dos por el precio de uno. Y, además, salpimentado en grado máximo con el mejor humor. Así fue el acto de Los Domingos Culturales correspondiente al mes de marzo, que tuvo lugar en la sede del grupo de paisanos de la diáspora en la capital de España con un doble protagonismo. De un lado, con un coloquio a cargo del polifacético actor, escritor y humorista Rubén Faura. Y, de otro, con la presentación a los integrantes de este grupo, y a todos los asistentes, del libro El Riazorazo, por parte de su autor el periodista Juan López Córcoles. Un doblete en el que, además del humor, el cariño e incluso pasión y forofismo por el Alba fueron el denominador común.

Se inició con una breve presentación de ambos personajes, que corrió a cargo de Patricio Morcillo, presidente de la oficialmente denominada Asociación Cultural Albacete en Madrid, agradeciéndoles su presencia. Que en el caso de Faura era por segunda vez en este curso de actos que comenzó en el mes de septiembre, y cuya repetición fue solicitada por muchos socios, que salieron encantados de su debut. Y en el del periodista, por entender la Asociación que era obligado tras el evento del mes anterior en el que Francisco Villaescusa hizo lo propio con su libro sobre el Alba De blanco a blanco. 

«Así cerramos el círculo y, a la par como hicimos con el anterior libro, ofrecemos a nuestros socios también la opción de que compren el libro firmado y dedicado por su autor, lo que incrementa su valor emocional», concluyó Morcillo. Para, de inmediato tomar la palabra Faura, quien aprovechó para sembrar las primeras risas, ya que recordó la famosa frase del escritor Francisco Umbral en televisión de que había ido sólo y exclusivamente para hablar de su libro. «Yo, no, pero… sí para que sepáis que ahora mismo tengo dos obras teatrales en Madrid que no me importa lo más mínimo que vayáis a ver cuando os venga bien». 

Con un remate también muy aplaudido: «Y por tener la suerte la mayoría de vosotros de ser de Albacete, igual se os hace un descuento en la entrada». Este doblete de enorme mérito en la siempre muy competitiva cartelera de la capital española lo forman Histereotipos, en el Teatro Amaya, y Recién casados, en el Luchana; obras que debido a su éxito ya están afrontando su tercera temporada. «Y, como no hay dos sin tres», adelantó el humorista, también participa con sus monólogos en las grabaciones que en directo y con público se llevan a cabo del programa El Club de la Comedia para emitirse luego en televisión.

Igualmente se está volviendo a emitir en SkyShowtime, una nueva plataforma televisiva en streaming, la serie Por H o por B, que ya puso HBO, y cuyo casting ganó el paisano entre muchos colegas porque le exigieron que tenía que hablar en inglés. «Y, claro, mi inglés con el inigualable acento albacetense les impresionó y me eligieron», según explicó provocando nuevas risas. Además, entre sus inmediatos proyectos está el de su debut al frente de la dirección de una obra teatral, que se producirá dentro de unas semanas.

Por cierto que, al igual que en su anterior comparecencia, Faura insistió en que todos los albacetenses en general, pero en mayor medida los que viven fuera, deben presumir más del humor de la tierra, «que, sin despreciar al de otros lugares, es no únicamente muy bueno, sino algo tan importante o más: es único, y con él nos conocen y reconocen, y soy testigo de ello, en todas partes!».

Una circunstancia que, cual añadió, no ocurre sólo en las actuaciones, sino en la vida privada de una persona normal, al margen de su profesión. «Es que tenemos este pedigrí, y en cuanto se enteran de que eres de Albacete, como estamos de moda por el humor, ya suponen que tú también lo tienes». Cuestión que remachó Juan López, al que también le ha ocurrido en sus labores profesionales en la sección de Deportes de la Cadena SER, en Madrid, donde reside, y en otros lugares.

Humor por partida doble. Ese sentido del humor lo mostró de inmediato al comentar que en La Coruña, donde estuvo presente en la cabina de radio de la emisora para el decisivo encuentro el 11 de junio del año pasado entre el Dépor y el Alba jugándose el ascenso, todo fueron facilidades y parabienes por parte de los colegas de allí, hasta que el Alba logró la milagrosa remontada que dejó a los gallegos de nuevo en el pozo de la Primera RFEF. «No estaban para mucho humor, cual demostraban en sus miradas, como si los periodistas albaceteños, que claro que nos alegramos y lo cantamos, tuviéramos la culpa».

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