La rica Historia de España a lo largo de los siglos hace que su potencialidad traspase nuestras fronteras patrias y llegue del uno al otro confín. La tibieza en recordar de manera institucional la hazaña del El Cano hacia oscurecer otro quinto centenario, el de la llegada de Hernán Cortés a México y la fundación de la ciudad de Veracruz. En esta ocasión aparecerá un sello de Correos recordando aquel 22 de abril de 1519 donde se erigió el municipio mexicano.

La filatelia que es el arte de coleccionar sellos por placer, estudio o cultura, pero no por motivos económicos, no permanece ajena a las hazañas de aquellos intrépidos hombres. 

En el 500 aniversario de la llegada de Hernán Cortés a México el sello de tarifa C, con una correspondencia de 1,50 euros, está impreso en offset sobre papel autoadhesivo con una tirada ilimitada en el número. 

La estampa recoge la imagen de un grabado del rostro en primer plano del conquistador con la cabeza girada hacia el fondo del sello, que recoge un detalle de la litografía acuarelada de la Plaza de Veracruz, realizada por Carl Nebel, arquitecto germánico y dibujante costumbrista, entre 1829 y 1834.

Entre ofrendas. El 14 de marzo de 1519, la expedición de Hernán Cortés llegó al río Tabasco en Grijalva, ciudad de Potochán. Allí, los indios maya-chontales no le dejaron pasar, pero según cuenta la leyenda, al ver a Cortés montado en su caballo, además de la superioridad tecnológica de los españoles, decidieron retirarse. Por todo ello, las autoridades de Tabasco colmaron de ofrendas a Hernán Cortés.