Francisco J. Martínez

CARTA DEL DIRECTOR

Francisco J. Martínez


El clamor de una cultura

25/10/2020

Era la primera visita del ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, a Albacete y todo parecía que iba a ser una balsa de aceite en una velada típicamente otoñal. Estaría en la gala inaugural de Abycine, en un clima favorable. Pero a su llegada una treintena de profesionales taurinos le esperaba con las únicas armas de varias muletas y una pancarta en la que se rezaba «También somos cultura» para mostrarle su indignación después de que se les hayan negado las ayudas de los ERTE y muchos no hayan percibido ni un euro por su labor profesional desde hace ya casi un año. Los manifestantes fueron al límite con su protesta y el ministro entró en el Teatro Circo a la carrera y se lo llevaron por la puerta de atrás medio escondido ya entrada la noche.
Al principio de la pandemia, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, manifestó que no dejarían a nadie atrás, pero unos meses después muchos de los profesionales taurinos, esos que trabajan seis meses para subsistir todo el año. Sin festejos y sin ayudas económicas del Estado, cuando cotizaron durante años sin que la Seguridad Social les perdonase ni una cuota, no les queda otra que luchar por su forma de vida.
Un ministro no debe entrar ni salir de un teatro como lo hizo el viernes en Albacete. No hay derecho a eso, pero tampoco hay derecho a abandonar a miles de familias al ostracismo y no darles ni las más mínimas explicaciones desde hace meses. Ahí está la diferencia entre un Gobierno para los ciudadanos y un Gobierno sobre los ciudadanos. Por sus hechos los conoceréis, reza el Evangelio.