El cereal acumula una subida de 50 por tonelada en Albacete

E.F.
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En la última sesión de la Lonja Agropecuaria de la Mancha, la cotización de todas las clases subió 25 euros de forma lineal, lo que supone que la escalada ya cumple su tercera semana

Almacén de cereal. - Foto: T.F.M.

Desde el jueves 24 de febrero, el día que comenzó la guerra de Ucrania, la cotización del cereal en la Lonja Agropecuaria de la Mancha acumula una subida media de 45-50 euros por tonelada, sin que por el momento se vea el final a la escalada alcista que afecta a todos los mercados agrícolas.

En la sesión de ayer, las cotizaciones de la Mesa del Cereal, Leguminosas y Oleaginosas registraron subidas generalizadas y agudas. Los cereales se anotaron, en bloque, una subida lineal de 25 euros por tonelada; los yeros, la veza y los guisantes se anotaron una subida  idéntica, también de 25 euros.

 En el caso de la lenteja castellana, en la sesión de ayer la subida fue de 'solo' 10 euros. También cabe destacar que ayer sí cotizaron las alfalfas, que cotizaron entre los 220 y los 190 euros por tonelada. En la región, destacó el caso de la lonja de Toledo, que suspendió la cotización de los cereales debido a la «inestabilidad» en Ucrania.

Ahora mismo, son numerosas las voces que piden al Gobierno de la nación que autorice la importación extraordinaria de cereales de terceros países. Según La Confederación Española de Fabricantes de Alimentos Compuestos para Animales (Cesfac), las existencias de EEUU y Argentina podrían ayudar a estabilizar los mercados.

Los datos que maneja Cesfac indican que España aún tiene reservas para seis semanas, mientras que hay «disponibles e invendidas» 13,6 millones de toneladas de maíz solo en Estados Unidos. En Argentina, habría 7,5 millones de toneladas de maíz, 100.000 toneladas de semilla de girasol y 400.000 más de torta de girasol.

Lo que si se confirma es que, de momento, la vía de suministro que procede de los países del Mar Negro está cortada. Según el Servicio Exterior del Departamento de Agricultura de los EEUU (Fas-USDA), Ucrania cerró sus puertos entre el 24 y 25, justo al inicio de la invasión. Rusia aún envía algún barco, pero a un coste prohibitivo debido a las sanciones y a la subida de costes -fletes y seguros- por la guerra.

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