Miguel Romero

CATHEDRA LIBRE

Miguel Romero


Bróker de materias primas

04/04/2022

Como suelo hacer cuando propongo meditar sobre una palabra compleja, tal cual bróker, pido asistencia a la RAE y me aclara la definición establecida: 'Persona que, por oficio, actúa como intermediaria en operaciones de compra y venta de valores financieros y de acciones que cotizan en bolsa'. De esta forma, apenas me equivoco en el término y así también evito esos errores tipográficos o 'de bulto' como en mi artículo anterior cuando en lugar de aparecer miccionar: 'expulsar la orina por la uretra' expresaba erróneamente ficcionar: 'crear una ficción literaria o cinematográfica…'.
Y es que me he dado cuenta que los jóvenes de ahora lo tienen todo más fácil a la hora de decidir la profesión elegida. Perder el tiempo en una carrera universitaria, cuatro o cinco años de formación, dura y compleja, un par de años después, con un máster, de matrícula cara, en tierras extranjeras, más una dedicación exclusiva en tiempo y reflexión para intuir cuáles deben de ser las profesiones del futuro, es una 'real tontería' cuando están esas modernas, rentables y elegantes profesiones a las que acceder con facilidad: bróker de materias primas, tal como el hijo del duque de Feria, Luis Medina, le manifestaba al juez Adolfo Carretero.
¿Cómo puede ser que los padres de ahora no se den cuenta cuál debe de ser la profesión más rentable de sus hijos? Esa misma que nos habla de carne, alimentación y minería, elementos fáciles de adquirir –tal cual el morro de cerdo- demostrando lo fácil que es hacerse rico a fuerza de tímidas comisiones o «recurriendo en muchos gastos porque el mercado no tenía estabilidad», llegando a blanquear ese dinero normal en porcentaje de comisión también normal. No darse cuenta, con lo fácil que es.
Por eso, conocer a San Chin Choom o a la funcionaria Elena Collado, sin olvidarnos de la mercantil malaya Leno o el primo de Almeida, es lo más rentable. De esos especímenes, parece ser que hay muchos o por lo menos, algunos, preparados en buena Universidad para ser bróker de materias primas, y olvidarnos de dedicar ese tiempo a estudiar Ingeniería de Caminos, Aeronaútica, Medicina, Derecho o Telecomunicaciones, cuando tenemos profesiones 'elegantes' en las que uno puede doctorarse sin estudiar lo más mínimo un libro de texto y sí una cuántas clases, en esas universidad privada de María Díaz de la Cebosa.
Pues adelante amigos. Estas son las profesiones del momento, ¿tal vez, las del futuro también?, ya que no todos pueden estar ocupando un sillón en Sálvame, Socialité, Salsa Rosa o Lo que necesitas es amor, sin olvidarnos de Mujeres y Hombres y Viceversa; sino que hay que estudiar y formarse en 'Bróker de materias primas' porque éste es el mejor de los caminos.