Una expedición de jóvenes viaja hoy para recoger ucranianos

Teresa Roldán
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El comboy humanitario llevará mercancías facilitadas por una cantante de ópera de Ucrania residente en España y, gracias a donaciones y el alquiler de un autobús y varias furgonetas, recogerán a exiliados

Imagen de familias de madres y niños ucranianos antes de partir para España. - Foto: Rubén Serrallé

Con casi 23.000 euros ya recaudados, a falta de contabilizar otras donaciones, con lo que finalmente se podría alcanzar la cifra de 25.000 euros, y muchas ganas a aportar su granito de arena, 10 jóvenes albacetenses voluntarios pondrán rumbo a la frontera de Polonia con Ucrania hoy por la mañana para llevar material humanitario y sobre todo para recoger y trasladar refugiados hasta los centros de acogida, bien de Pozuelo de Alarcón, en Madrid, o de Alicante. Gracias a la solidaridad de muchos ciudadanos, ante la gran acogida que ha tenido esta iniciativa, que partió de tres jóvenes (Mesías, Antonio y Víctor), al que después se sumaron Álvaro, Javier y Elena, vinculados todos ellos con la labor pastoral de las parroquias y del colegio de Escuelas Pías,  iglesia católica, la expedición solidaria que hoy parte desde Albacete saldrá con un autobús de 57 plazas y una furgoneta (de nueve plazas), ambos vehículos alquilados gracias al dinero donado, así como con otras tres furgonetas donadas por la generosidad de personas anónimas. 

Este viaje humanitario es una iniciativa privada de varios jóvenes, que eso sí cuenta con el respaldo de diversos organismos e instituciones públicas, que busca colaborar en dar respuesta a la crisis humanitaria en Ucrania. Si bien inicialmente este grupo de jóvenes pretendía traer a personas ucranianas refugiadas a la ciudad de Albacete, para lo cual ya tenían alojamiento garantizado y manutención para unas 39 personas, ante la gran acogida que ha tenido esta iniciativa, donde todo el mundo, en particular de las parroquias,  se volcó en la búsqueda de soluciones y en enviar donaciones económicas, finalmente, los jóvenes impulsores de  este proyecto siguiendo las recomendaciones de las instituciones, en concreto del Obispado, Cáritas Diocesana y Bienestar Social, han optado por recoger a familias ucranianas pero dejarlas en un centro de refugiados.

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