Javier D. Bazaga

NOTAS AL PIE

Javier D. Bazaga


La polémica en la igualdad

20/05/2022

La última pugna política en el seno del Ejecutivo central ha sido a raíz de los supuestos avances para las mujeres que pretenden lograr con las leyes que están presentando. Primero con la del aborto, con la que se permite a las menores de 16 años abortar sin consentimiento de sus progenitores y, por tanto, en muchos casos sin su conocimiento. Yo no tengo niñas, tengo niños, pero en cualquiera de los dos casos les aseguro que no me gustaría que eso ocurriera. Ni por el conocimiento ni por el consentimiento. Creo que los padres y madres en esto tenemos una experiencia que podemos ofrecer a esos jóvenes. Se abren muchas aristas en este debate, como la educación sexual necesaria para que nuestros jóvenes no tengan que llegar a debatirse en una decisión de tanto calado que, según en qué sentido se tome, marcará y condicionará su vida para siempre. Y con 16 años no se tienen aún los conocimientos necesarios para tomar ese tipo de decisiones, por mucho que a esa edad nos creyéramos que ya lo sabíamos todo o nos consideráramos súper maduros.

Lo malo es que una legislación que venía para avanzar y seguir consolidando derechos para las mujeres, se ha vuelto a convertir en discusión política entre ministras del Ejecutivo, sobre todo por esa otra cara de la ley que es la baja laboral automática por menstruación. Una posibilidad que ya se viene aplicando en numerosos casos en los que es necesario, y que vuelve a poner a la mujer ante una situación diferenciada con el hombre, y que la puede llegar a perjudicar laboralmente, estigmatizándola y colocándola en una posición de debilidad.

Una ley además que coloca a las comunidades autónomas en una situación delicada puesto que obliga a realizar esos abortos en la sanidad pública, cuando en Castilla-La Mancha, por ejemplo, no existen médicos que realicen esa práctica acogidos a su derecho a la objeción de conciencia, y teniendo que derivar los casos a la sanidad privada con acuerdos.

Pero no se quedó ahí la cosa. Luego vino la tramitación de la conocida como 'Ley del solo sí es sí', medida estrella de la ministra Irene Montero y de Unidas Podemos, en la que el PSOE tuvo que retirar una enmienda que pretendía abolir la prostitución en España y que amenazaba la aprobación de la norma en el Congreso de los Diputados. El PSOE contraatacó ayer presentándola como ley en la Cámara Baja y obligando a Unidas Podemos a posicionarse con una ley que pretende abolir la prostitución, y no regularla como se han manifestado desde las filas 'moradas' en alguna ocasión.

Flaco favor creo que se les está haciendo a las mujeres si más que pensar en ellas, se está pensando en cómo utilizarlas para ganarse el apoyo de los ciudadanos. Ya lo advirtió la consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha esta semana: "a las mujeres hay que protegerlas de cualquier polémica".