Una historia que habla de amistad y tambor

Antonio Díaz
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La localidad de Tobarra es pionera desde la celebración de la primera Muestra de 1983 en Mula y dio los primeros pasas para consolidar las Jornadas

Imagen del desfile de delegaciones. - Foto: José Miguel Esparcia

Las trigésimo sextas Jornadas de Exaltación del Tambor y el Bombo Tobarra 2023, son una espléndida realidad que viven desde el viernes intensamente los vecinos de la localidad y los miles de visitantes que se congregan en esta celebración, que se inició el viernes a las 16 horas, con el inicio el toque el tambor y el bombo y que tuvo ayer una gran jornada, cargada de actos y celebrada por tamborileros y delegaciones participantes.

Muchos son los lenguajes que hablan los tambores y bombos de España, que comenzaron a encontrarse por vez primera en Mula en 1983 y hoy siguen escribiendo una historia de habla de devoción, amistad y, por supuesto, de tambor.

Guillermo Paterna Alfaro, cronista oficial de la Villa y de las Jornadas valoró la trigésimo sexta Tamborada Nacional «que es la denominación que tenemos acuñada desde que somos Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad,  y los tambores, con sus toques rituales, como bien se decía en la proposición a la Unesco. Las Jornadas que celebramos este año 2023 en Tobarra, son la continuación a todo este proceso que se inició hace 40 años en Mula, 1983, con la celebración de la primera Muestra del Tambor, que así se denominó aquel encuentro, porque Mula 1983 es el germen de las actuales Jornadas como se conocen».

   En ese proceso histórico, recordó el cronista oficial «la continuación de esas primeras Jornadas de  Mula fue en Hellín, con carácter ya Nacional, siguió Moratalla en 1987 y Tobarra en 1989, donde se celebraron las cuartas, por lo tanto podemos afirmar que Mula, Moratalla, Hellín y Tobarra somos los fundadores de las Jornadas, los primeros que dimos los pasos con la estructura que actualmente se mantiene, pero que ya estaba implícita en aquellas primeras Jornadas de esos años, con algunas ausencias puesto que todavía no estaba el calendario, ni había nada programado, así que Mula 1983, Hellín 1986, Moratalla 1987 y Tobarra 1989, dimos los primeros pasos para consolidar lo que hoy son las Jornadas Nacionales de Exaltación del Tambor y el Bombo, bajo la denominación de Tamborada Nacional», digamos.  

Anterior encuentro. Recordó  el cronista oficial que Tobarra no acoge unas Jornadas desde el año 2000, «que fueron las anteriores, las segundas para Tobarra, porque como decía en 1989 fueron las primeras y después nos fuimos al año 2000, las segundas que organizaba Tobarra y justamente, han pasado 23 años y lo cierto  es que las Jornadas del  año 2000 marcaron mucho para la historia de estas Jornadas, tanto es así que estuvieron muy trabajadas, muy bien preparadas y el éxito fue arrollador de participación y organización y te puedo decir que la gente, los participantes, quedaron muy contentos y todavía, los que estuvieron en Tobarra 2000 recuerdan aquellas Jornadas, por lo bien que lo pasaron y las ganas que les quedaron  de volver a Tobarra. Sin duda, hay gente que durante 23 años ha estado aguantando esas ganas de volver a Tobarra y te aseguro que me lo han dicho muchos de ellos. Textualmente:tenemos muchas ganas de volver a Tobarra». 

Un fin de semana muy apretado, vivido con intensidad y como destacó Guillermo Paterna, «te aseguro que al tambor no lo frena ni la lluvia, ni el frío, ni nada, porque el año pasado, en Alcorisa llovió, pero ni un solo tambor se quedó sin salir, porque eran más las ganas de tocar, que cualquier impedimento, que es lo que pasa en Tobarra, porque todo el mundo vive estas Jornadas y te lo digo de primera mano, porque tenemos grupos en los que estamos en contacto durante todo el año».