La colocación de placas fotovoltaicas en hogares y pequeñas instalaciones privadas para reducir el recibo de la electricidad y minimizar la contaminación atmosférica no es nueva. Y si bien el interés de los particulares por este sistema de energía verde iba aumentando de forma sosegada, la escalada de precios que está experimentando el suministro eléctrico ha generado una avenida de solicitudes de autorización ante la delegación provincial de Desarrollo Sostenible de Albacete.
En los últimos tiempos, las administraciones públicas vienen acometiendo planes de renovación del alumbrado exterior y de eficiencia energética, con la renovación de ventanas, bombillas de bajo consumo y la instalación de placas fotovoltaicas sobre cubiertas. No obstante, el mercado del autoconsumo y el segmento doméstico están siendo la gran sorprensa de los últimos dos años, tanto que en 2020, según la Unión Española Fotovoltaica, el autoconsumo dio un paso sin precedentes con 596 megavatios de nueva potencia, lo que supone un crecimiento del 30 por ciento con respecto a 2019. Un poco menos, pero no por ello desdeñable, es el 19 por ciento de aumento que aportó el autoconsumo a nivel doméstico.
Son cifras que perfectamente se pueden extrapolar a la provincia de Albacete, donde la instalación de placas para generar energía fotovoltaica se han multiplicado por siete en los últimos tres años y ha crecido un 30 por ciento entre 2020 y 2021. El salto cuantitativo experimentado por el sector de la energía solar en este territorio es sorprendente: mientras en 2019 pasaron por la delegación provincial de Desarrollo Sostenible 32 expedientes para autorizar instalaciones fotovoltaicas, 15 de ellos presentados por particulares y 17 por personas jurídicas -empresas-, en 2020, ese mismo número se quintuplicó y pasó a 166 autorizaciones de instalaciones solares. Pero lo más llamativo, es que casi el 90% de estos expedientes fueron presentados ante el Gobierno de Castilla-La Mancha por personas físicas -142- frente a los 24 generados por empresas.
Un año prometedor. A punto de despedir 2021, ya promete convertirse en un año histórico para el sector de la fotovoltaica, pues en los 10 primeros meses del año, la delegación provincial ha resuelto y autorizado la colocación de 234 instalaciones de placas solares, lo que significa que el número de estas se ha multiplicado por siete con respecto a 2019 y crecido un 30 por ciento con respecto a 2020, sin que 2021 esté concluido. Mientras, las peticiones particulares se han multiplicado por 13 en los últimos tres años, pasando de las 15 de 2019 a las 192 de 2021 que han culminado el proceso de energía verde para autoconsumo.
«Es cierto que antes de la escalada de precios de la electricidad, el número de expedientes sobre instalaciones fotovoltaicas iba creciendo, por ahorro y por conciencia, también desde que se derogó el impuesto al sol», asegura la delegada provincial de Desarrollo Sostenible, Llanos Valero, quien corrobora que a partir del imparable aumento del coste de la luz, «estamos recibiendo muchas más peticiones para autoconsumo».
(MÁS INFORMACIÓN EN EDICIÓN IMPRESA Y EN LA APP DE LA TRIBUNA DE ALBACETE)