Uno de los 'debes' en la plantilla del Real Madrid durante las últimas temporadas ha sido el de no tener un sustituto para  Carlos Henrique Casemiro, algo que la directiva blanca ha solucionado este verano con la incorporación de Aurélien Tchouaméni y que, de momento, le ha servido al brasileño para sacar su mejor versión y hacerse con una Supercopa de Europa de la que salió como MVP.

El galo impresionó durante la pretemporada en EEUU y se empezó a hablar de que era el relevo inmediato para Casemiro. A esto había que añadir los 80 millones de euros pagados al Mónaco por su traspaso.  

Durante la pretemporada, el sudamericano recibió el cariño de Ancelotti, que lo tiene como pieza angular de la escuadra. el medio no tardó en devolverle la confianza.

Primer partido oficial, primer título y se lleva el premio a mejor jugador. Todo un mensaje para aquellos que le querían 'jubilar' antes de tiempo. Eso sí, el centrocampista mantuvo su tónica habitual de alguien modesto y comprometido por el equipo cuando compareció ante los medios, dejando claro que el fichaje de Tchouaméni no le ha molestado.

«Es importante para nosotros, pero no me ha picado su llegada porque al final todos saben mi carácter y lealtad con este club a diario», subrayó Casemiro, que se permitió dar un consejo a su 'sucesor':«Tchouaméni ya mostró que es un gran jugador. Tiene que seguir con lo que está haciendo en los entrenamientos y darlo todo en el campo».

Ytodo esto lo manifestó tras llegar cojeando y con sangre en la pierna después de un partido en el que fue fundamental en la destrucción y construcción. Contundente al corte, en una acción se tiró abajo a rebañar un balón, tras lo que algunos integrantes del banquillo del Eintracht se lo recriminaron. Es su juego. Yes que se impuso físicamente a todos los rivales y junto a Militao, fue toda una pesadilla para el ataque alemán.

Además, dio la asistencia de gol a Alaba después de imponerse por alto en un córner y en el minuto 60 solo el travesaño, tras un disparo desde fuera del área, le impidió cerrar una noche redonda en la que, sin embargo, mostró que para sacarle de la titularidad hará falta muchísimo más.