El Albacete Balompié, en su regreso a la tercera categoría del fútbol nacional, se ha hecho fuerte en el Carlos Belmonte. El equipo de Rubén de la Barrera es el mejor local con diferencia, pues en las nueve jornadas disputadas en el Carlos Belmonte apenas ha dejado escapar dos puntos merced a un empate con el filial del Betis. El resto de partidos se han saldado con victoria, para acumular un total de 25 puntos.

Los datos como local de un Alba invicto en el Belmonte, en lo que a la liga se refiere, se completan con los datos de los goles encajados, apenas tres en esos nueve encuentro disputados, mientras que a nivel ofensivo son 16 los que se han anotado.

Resulta difícil encontrar mejores datos de un Albacete como local en sus más de 80 años de historia, si bien es cierto que en nada tenían que ver aquellas primeras temporadas con grupos más reducidos o esos años de deambular por categorías regionales, pero ni en la espectacular campaña 1974-75, la de los 111 goles, la trayectoria en casa fue tan inmaculada.

Pero sí que hay un Albacete que sobresale por encima de todos, incluso del actual equipo. Se trata del primer Alba que dirigió Benito Floro, el de la temporada 1989-90 en la Segunda División B que realizó la que, seguramente, sea la temporada más completa del club manchego en su historia, por encima incluso de las dos que lo llevaron a la Primera División.

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