La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha acogido esta mañana la primera sesión del juicio contra el cocinero de un restaurante chino acusado de intentar matar a cuatro personas, en el que el procesado negó que quisiera acabar con la vida de nadie.

En la vista, el procesado explicó que fue a hablar con su jefa porque le ocultaron la verdadera enfermedad que tenía y le obligaban a seguir trabajando, además afirmó que le daban pruebas médicas falsas y le debían cinco años de sueldo y señaló que quería que lo llevaran al hospital para que le hicieran más pruebas.

En un momento dado, el procesado vio que una mujer, que era la nuera de su jefa, le estaba grabando y le dijo que parara. Según el acusado, la mujer, J.W.Y.Y., cogió un cuchillo, por lo que él cogió otro para defenderse, instante en el que el acusado explicó que "le di sin querer a mi jefa".

Luego señaló que la mujer que grababa decía que su hermano era mafioso y le hizo una seña al hijo de su jefa para que cogiera un cuchillo y le hizo señas para que le cortara el cuello y el cogió el cuchillo para defenderse y le dio al hijo de su jefa, J.B.

En cualquier caso, dijo que el hijo de su jefa no podía tener tantas heridas, porque él no le dio varias cuchilladas y afirmó que todo el mundo sabía que se autolesionaba.

En lo que se refiere a la camarera, X.Z., dijo que no había tenido ningún problema con ella y aunque dijo que creyó que ella estaba hablando por teléfono con la Policía y que por eso fue a quitarle el teléfono y al no darse cuenta de que llevaba el cuchillo en la mano (un pequeño hacha) le cortó en el cuello, luego afirmó que ella le había dicho que estaba llamando a unos matones.

También negó que hubiera amenazado de muerte a la novia del hijo de la dueña, de hecho afirmó que fue ella la que le dijo que era de la mafia. "La chica del móvil me dijo yo soy de la mafia y no vas a poder hacer nada conmigo, ella me lo dijo a mí".