«Con la abstracción es como mejor me expreso»

Antonio Díaz
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Ramón Torres acaba de clausurar Procesos, una exposición de pintura y escultura en Elche. El artista valoró los resultados de sus últimas muestras y adelantó los proyectos en los que trabaja.

Ramón Torres. - Foto: Rubén Serrallé

Ramón Torres acaba de clausurar Procesos, una exposición de pintura y escultura en Elche. El artista valoró los resultados de sus últimas muestras y adelantó los proyectos en los que trabaja. 

Acaba de cerrar la muestra.

Sí, en la galería de Ángel Castaño, en Elche, donde estuve ya hace cuatro años y además, tenía otra colectiva en Murcia. También acabo de terminar unas convivencias cerámicas en Castellón.

¿También cerámica?

Sí, la cerámica para mí es muy interesante, una expresión plástica en tres dimensiones,  es un mundo que, cuando  lo tocas, te contagia, tiene mucha magia.

¿Sigue con sus series en azul?

Pasas por varias etapas pero, evidentemente, lo principal es que siempre he buscado la abstracción. Siempre me llamó el arte abstracto y, después de dejar la figuración, con la abstracción es como mejor me expreso, más cómodamente. Recuerdo que durante el confinamiento desarrollé un trabajo elaborando series en mi estudio, utilizando los soportes que tenía. En eso estoy, he hecho series tan dispares como una de arte pop, collage, pintura imitando la acuarela, como la que expuse en la galería de Pablo Alfaro y, lo último ha sido esta serie azul, en la que me he encontrado muy bien, aunque la he dejando por el momento y estoy con la serie Horizontes, en la que incorporo color. La verdad es que no quiero entrar en la rutina, de la estabilidad de hacer siempre lo mismo, porque con lo que disfruto es con el proceso y si siempre fuese el mismo, dejaría el arte y haría otra cosa.   

¿Series siempre o combina con obras individuales?

Me gustan las series, pero por la disparidad de planteamientos de estas propuestas. No me da tiempo a aburrirme, ni a entrar en una dinámica de hacer siempre lo mismo. Ahora, no sé cuanto va a durar, porque también vuelvo a incorporar el negro en mi obra, que fue la exposición que hice en el Museo Municipal, con el negro como hilo conductor. Inmediatamente entramos en el confinamiento, fui el último artista en esa sala municipal, antes de convertirse en Registro. Después de aquello empecé a desarrollar trabajos por series.  

¿Qué proyectos tiene?

Al Museo Municipal, por ejemplo, me gustaría volver, pero tiene que pasar todavía un tiempo y reposar la obra, porque además, hay otras salas importantes en Albacete, como es La Asunción o el Museo de Albacete, al que tenemos un poco olvidado, pero tenemos que señalar que es la sala más importante que tenemos. Creo que tanto la pintura, como el Museo de Albacete, se merecen que haya un diálogo y un compromiso de los artistas y viceversa. Una colaboración mayor estaría muy bien. 

En cuanto a los proyectos más inmediatos, es una exposición que tengo en Benicasim, en Castellón, junto a un gran ceramista. Será conjunta y con toda probabilidad, en septiembre, en una sala muy importante, donde actualmente está exponiendo Tàpies, así que no se puede pedir más en ese sentido, me parece. 

¿En Albacete hay algo?

Sí, sería una exposición más pequeña, pero tengo que concretar aún extremos, pero además me han seleccionado en un certamen internacional de arte textil, en Gata de Gorgos, Art Al Vent. Además, recordamos que Naturalezas Muertas, que se hizo en el Museo Municipal, en la que participamos 22 artistas y fui comisario y sigo con ello. Después de estos dos años de parón, se va a presentar en la sala del Ayuntamiento de Murcia,  en enero.