El 1 de octubre de 2021 la Guardia Civil puso en marcha los denominados Equipos Arroba, mediante la Orden de Servicio 29/2021, tomando como referencia la Estrategia Nacional de Ciberseguridad 2019, el Plan Estratégico contra la Cibercriminalidad del Ministerio del Interior y el Plan Estratégico de la Guardia Civil 2021-2024.

La Comandancia de Albacete no fue una excepción, creando su propio equipo, compuesto por cuatro agentes. 

La comandancia contaba ya con dos guardias civiles que formaban el Edite (Equipos de Investigación Tecnológica), que se encargaban de las investigaciones de los delitos informáticos más complejos, como señala uno de los cuatro componentes del Equipo Arroba, el guardia civil Antonio Carcelén Aparicio. «Con la gran cantidad de delitos de estafa que se estaban produciendo estaban desbordados. A nivel nacional pasaba lo mismo, por eso se decide poner en marcha los Equipos Arroba».

Desde su puesta en funcionamiento, todos los delitos cibernéticos llegan al Equipo Arroba y aunque no hay cifras oficiales, sobre la cantidad que reciben, Carcelén manifiesta que son alrededor de 1.000 al año. «Las cifras de los delitos informáticos se contabilizan a nivel Nacional, pero por decir un número son cerca del millar las denuncias presentadas cada año en la provincia».

Para formar el equipo se buscó a cuatro guardias civiles que en sus respectivas Unidades ya se encargaban de las investigaciones tecnológicas. Además los agentes no dejan de formarse. «Para esta clase de delitos se necesita una formación continua y requiere por parte de los agentes una dedicación importante en formación autodidacta, porque al fin y al cabo aprendemos unos de otros y cada uno aporta su granito de arena».

Organización. Cuando se presenta una denuncia por un delito informático ante la Guardia Civil, inmediatamente llegan al Equipo Arroba. «Por decirlo de alguna manera, somos los encargados de fiscalizar los delitos tecnológicos. Una vez que tenemos conocimiento de los delitos por parte del Equipo Arroba, se realiza un estudio del atestado, en el que si no son investigaciones complejas se asesora a las unidades territoriales para que lleven a cabo ellos dicha investigación. Si por el contrario son delitos graves o delitos que requieren investigaciones más complejas, las asume el Equipo Arroba.

Además hay delitos que, bajo la supervisión del jefe de la Unidad Orgánica de Policía Judicial se derivan a otras unidades. «Por ejemplo, si son casos muy graves se les encargan al Edite o a un equipo territorial de Policía Judicial».

En cualquier caso, los guardias civiles del Equipo Arroba trabajan codo con codo con los dos agentes del Edite. «El Equipo Arroba se creo como una Unidad intermedia entre las unidades territoriales y Unidades más especializadas como el Edite. Y parte de nuestra misión es apoyar al Edite cuando por personal o por medios sea necesario, actualmente compartimos dependencias y en muchos casos trabajamos como Unidad única». En cualquier caso, el Edite se dedica a investigaciones más complejas como pueden ser los casos de pornografía infantil y contra el honor de las personas. Además de dedicarse a lo que se refiere a tratamiento de dispositivos de almacenamiento de información, análisis, volcados, clonados, etcétera.

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