Los nacimientos van recuperándose muy poco a poco del descalabro que sufrieron durante los dos peores años de la crisis pandémica. En los primeros cinco meses de 2022, los alumbramientos han registrado un leve repunte de un tres por ciento con respecto al mismo periodo de 2021, si bien todavía se encuentran un cuatro por ciento por debajo del año 2019, previo al covid.

Los datos hechos públicos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) cifran en 222 los nacimientos que se asistieron en mayo pasado, acumulando así 1.118 desde que empezó el año, una cantidad ligeramente superior al acumulado de 2021, pero que todavía no se acerca a los 1.216 nacimientos del primer quinquemestre de 2018.

De las 222 nuevas vidas alumbradas en mayo, el 34% vinieron al mundo por madres que tienen entre 30 y 34 años, siendo la edad mayoritaria en los nacimientos que se producen en la provincia de Albacete. Por detrás, las mujeres de 35 a 39 años, que en mayo aportaron 73 nuevas vidas al registro civil y al padrón continuo del INE.

Llama la atención que donde más han subido porcentualmente los nacimientos intermensuales es entre las madres que tienen entre 45 y 49 años, que en mayo dieron a luz a cuatro bebés, dos en abril, ninguno en marzo, y tres tanto en febrero como en enero.

Respecto al acumulado en lo que va de año, es decir, los nacimientos totales que se anotan entre enero y mayo, las madres que tienen entre 40 y 50 años aportan el 11% de la natalidad provincial, con 122 hijos nuevos biológicos. No obstante, el perfil más habitual de parturientas en Albacete tiene entre 30 y 34 años, aunque en números absolutos van muy seguidas de las madres que tienen entre 35 y 39 años. En total, desde enero hasta mayo de este año, las mujeres gestantes de entre 30 y 40 años proporcionaron 720 nuevos alumbramientos, lo que representa el 65% del total de estos cinco primeros meses.

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