El Colegio de la Abogacía albacetense tendrá que abandonar sus instalaciones del Palacio de Justicia ubicado en la calle San Agustín por orden del Ministerio de Justicia.
Así lo confirmaba ayer a La Tribuna de Albacete el decano del Colegio de la Abogacía, Albino Escribano, que señalaba que el 14 de junio recibieron un comunicado del Ministerio en este sentido. «A mitad de junio recibimos una comunicación del Ministerio de Justicia diciendo que el 31 de agosto nos teníamos que marchar de allí, después de estar 190 años conviviendo con la Audiencia Territorial primero y con el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) después».
Un comunicado que sorprendió a los letrados, especialmente por la celeridad con la que tenían que abandonar el edificio. «Después de casi dos siglos allí, que en mes y medio tengas que estar fuera me parece tremendo».
Por eso intentaron que se les diera un poco más de tiempo para abandonar las instalaciones. «Tal y como están las cosas ahora para hacer obras, pedimos que nos concedieran una prórroga hasta el mes de diciembre y ni nos han contestado».
Por eso, en el Colegio ya se encuentran en plena mudanza y empaquetando todo lo que tienen allí, para trasladarlo, de forma momentánea, al piso que tienen en la calle Caldereros 12, en el primero H, hasta que realicen las obras de adecuación de lo que será la nueva sede colegial, que se ubicará en el bajo del número 10 de la misma calle. «En el local es preciso hacer obras, por lo que tal y como están las cosas y lo difícil que es encontrar a alguien para hacer la rehabilitación y los precios como están, en dos meses y medio y con agosto por el medio, evidentemente era muy difícil poder irnos al local. Por eso decidimos, provisionalmente, irnos al piso, con el fin de no gastar dinero añadido, ya que tenemos esa posibilidad. Una vez que se realicen las obras, nos trasladaremos al local».
Justicia gratuita. Cabe destacar que el Ministerio de Justicia puso a disposición del Colegio de la Abogacía unas instalaciones en la nueva Ciudad de la Justicia, sin embargo, desde el primer momento el decano manifestó que no eran aptas para atender sus necesidades y dar un correcto servicio de justicia gratuita. «Las instalaciones de la Ciudad de la Justicia son totalmente insuficientes, no protegen la intimidad, ni los datos de aquellas personas que tengan derecho a solicitar la justicia gratuita y que tienen derecho a proteger sus datos y a que nadie conozca su situación económica».
Por ello, en cuanto el local de la calle Caldereros esté terminado realizarán allí todas las gestiones referentes al servicio de turno de oficio, sin embargo, hasta que no acaben las obras, la solicitud del abogado de oficio, se llevará a cabo, de forma provisional, en las instalaciones con las que cuentan en la Ciudad de la Justicia. «Atenderemos el turno de oficio en la Ciudad de la Justicia, pero el local es de 30 metros y la gente tendrá que hacer cola fuera, algo que suprimimos cuando entramos en el Colegio, para que todo el mundo pudiese dar sus datos con la intimidad precisa y no tuviese que señalarse como acreedor de la justicia gratuita o del turno de oficio o por su naturaleza económica. Si lo tenemos que atender así, lo atenderemos así, pero en principio nuestra idea es atenderlo de la mejor manera posible, para que el ciudadano esté lo más protegido posible, bien sea en la Ciudad de la Justicia de la forma en que sea necesario, porque no hay otra forma de hacerlo o directamente en las instalaciones del Colegio».
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