Ir abriendo pueblos, pero sin poder salir de ellos

C.S.Rubio
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Plantea una desescalada progresiva, diferenciando zonas con casos de los que no los tienen. Eso sí, cualquier medida debe tener el visto bueno de Moncloa

Ir abriendo pueblos, pero sin poder salir de ellos

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, plantea una «solución intermedia»  a la cuestión de cómo gestionar la vuelta progresiva de los ciudadanos a las calles. Como apunta, la desescalada debe ser «progresiva» y teniendo en cuenta las «diferentes circunstancias» de cada territorio.

En concreto,  lo que propone es  la posibilidad de que en algunas zonas específicas (aquellas donde la presencia del virus haya sido menor), los ciudadanos puedan ir abandonando sus casas, pero con la prohibición de salir de su término municipal.  Y es que, el mayor riesgo está en la movilidad, advierte. «No tendría sentido que dejáramos salir a los habitantes de un pueblo de montaña donde no hay casos para que se vayan a la ciudad».

Eso sí, la pauta de qué hacer solo la puede marcar el Gobierno de España, concluye García-Page, en clara alusión a las comunidades que ya plantean una desescalada por su cuenta.

Una región leal. En este punto, el presidente regional aprovecha para insistir en que Castilla-La Mancha  está siendo «leal» al Gobierno del Estado, lo que «nos ha llevado» a ser una de las comunidades autónomas del país con más y certeras estadísticas, «evitando así autoengaños» y apuntalando la franqueza como sinónimo de limpieza.

Esto no quita que Castilla-La Mancha no planteé  ‘peros’ a Sánchez. Uno de ellos sería la edad máxima de los niños que podrán salir a la calle a partir de del próximo 27 de abril.

A su juicio, los 12 años planteados por Sánchez podrían elevarse hasta los 14 o, incluso, los 16. «No me importa la edad de quien salga, sino el hecho de que estén separados y no en grupo. Podremos salir muchos siempre y cuando guardemos la distancia», concluye.