Mujeres de Tobarra recrean cómo lavaban sus madres y abuelas

G. González
-

Para homenajear a las mujeres de otros tiempos en el Día de la Madre, por iniciativa de Esperanza Alcaraz, jubilada que ha limpiado los antiguos lavaderos públicos del pueblo

Con el fin de rendir un homenaje a madres y abuelas, y dar visibilidad a los antiguos lavaderos públicos del municipio que estaban abandonados y que limpió la jubilada Esperanza Alcaraz,  un grupo de amigas se reunieron la pasada semana y decidieron realizar una actividad para recordar el esfuerzo que se tenía que realizar para lavar la ropa. Explica Esperanza Alcaraz, que la mayor parte de madres y abuelas «han pasado por estos antiguos lavaderos del pueblo, por eso, de cara al primer domingo de mayo, día de la madre, hemos querido recordar cómo se lavaba antiguamente, vistiendo con ropa de época, cargando barreños de agua porque, desgraciadamente, ya no pasa agua por los mismos; con jabones de losa, botijos y azuletes, pasamos una tarde inolvidable en la que no faltaron las historias contadas por algunas de las participantes, referidas a sus vivencias infantiles, cuando iban con sus madres y abuelas a lavar o, incluso, a bañarse en las acequias».

«Con sus propias manos». Por iniciativa de Esperanza Alcaraz, que se define como «una jubilada que anda por ahí, suelta por el pueblo e interesada en los antiguos lavaderos», hasta el punto que, con sus propias manos, «un rastrillo, unas tijeras y un legón», decidió  limpiarlos en el mes de febrero «despejándolos de toda vegetación y de la suciedad que les cubrían y ocultaban en la mayor parte de los  casos». Tras iniciar el trabajo voluntario y desinteresado, decidió compartir sus ideas con la alcaldesa, Amparo Ballesteros, y otros miembros de la corporación municipal, «para que continuaran conservando los que había descubierto, valorándolos como patrimonio histórico local y lograr que se señalice cada uno con su nombre par fomentar una ruta de senderismo por todos estos antiguos lavaderos de Tobarra». La iniciativa ha calado en el propio equipo de gobierno, que va a presentar un proyecto al grupo de desarrollo rural Campos de Hellín, con el fin de hacer realidad la iniciativa de Esperanza Alcaraz y señalizar los lavaderos, haciendo una ruta senderista. Hoy muy poca gente recuerda que hasta bien entrado el siglo XX en el que se popularizaron las losas de lavar o (más tarde) las lavadoras en las casas,  en los pueblos había lavaderos públicos situados en las afueras, junto a ríos o acequias. En Tobarra se construyó  entre 1917 y 1921, en una zona próxima al Puente Escribano, un lavadero cubierto que fue destruido antes de su inauguración oficial por una gran tormenta, lo que provocó que unos años después se optara por  hacer varios al aire libre en distintas zonas del municipio, precisamente esos a los que ahora se les da visibilidad por iniciativa de Esperanza Alcaraz. 

Las mujeres llegando a uno de los lavaderos
Las mujeres llegando a uno de los lavaderos - Foto: Esperanza Alcaraz