Jesús Iradier presenta en el espacio expositivo de Librería Popular, hasta el día 31 de marzo su nueva exposición, Los caballeros de la tabla. El artista y exbaloncestista, que también jugó durante varias temporadas en Albacete, comentó las singularidades de esta muestra.

¿Por qué ese título para la nueva exposición?

Los caballeros de la tabla es un homenaje a todos los pintores, escultores y ceramistas, al mundo de la creación. He escrito en concreto a todos los creadores que han sabido transportarnos al mundo mágico de los sentimientos, de donde brotan desaforadamente los colores, por el poder que me conceden los duendes de la inspiración, yo les nombro caballeros de la tabla de cocina, con un poco de miel dulce, que les alegre la vida.

¿Cuántas obras presenta?

Son 18 cuadros, de distintos tamaños y con técnicas diferentes. La verdad es que hay mucha novedad en cuanto a técnica. Sigo con mi línea habitual, pero como te decía, en cuanto a los técnicas que utilizo, sí hay cosas muy interesantes, considero.

¿Cómo es esa línea habitual de su pintura?

Bueno, pues mi pintura básicamente se sustenta en el dibujo y el color. Sobre esa base, está todo lo demás. Hay mucha gente que me pone en el campo del pop-art, pero no sé si compartirlo o no, porque eso me da igual, pero podríamos tener alguna conexión, acercarme posiblemente en algún momento.

¿Cómo eligió la obra para este espacio, en función de sus últimas creaciones?

Claro, ya expuse en Librería Popular hace un par de años y estuve encantado, todo se dio muy bien. Creíamos que era el momento de presentar obra nueva y, en este caso, tenemos dos salas y creo que es un sitio muy emblemático de Albacete y estoy muy contento con ellos. Luego, los que seleccionan los artistas también son muy amigos, Miguel Cano, Juan Ángel Fernández, Andrés Gómez Flores y, por supuesto, Ángel Collado.

¿Qué temas escogió?

Los temas son muy diversos, porque eso sí es aleatorio, me tengo que ilusionar con lo que hago. Así que hay diferentes significados en estas obras. Algunos tienen que ver con la cerámica antigua, que son muy curiosos, de mucho color, desnudos. Yo también me encargo de todos los soportes, pinto siempre todo sobre tabla y aprovecho materiales, ventanas, puertas y en la obra de presentación de la exposición, el cuadro de una cabina, es un trabajo de carpintería, porque está recortada esa cabina en madera, entonces me gusta escribir, pintar y trabajar con las manos. Todo eso está muy unido con la exposición, que sigue una línea, mi pintura y no es nada monótona, en cuanto a temas.

¿Algún proyecto para publicar en breve?

Sí, tengo un proyecto de poesías ilustradas, que está bastante avanzado, sigo escribiendo, pero por el momento no lo editaré, creo que esperará un poco. No es el mejor momento ni para exponer ni para publicar, estamos todos bastante asustados, es muy atrevido, pero hay que hacer cosas, no podemos pararnos. Si nos quedamos en nuestra casa, sería una barbaridad, no puede ser.

¿Sigue en contacto con el mundo del deporte?

Sigo en contacto, claro, con los antiguos compañeros del Madrid, del Barcelona, Estudiantes, de la selección, de todos los equipos por los que pase, que es algo que no se olvida. Te queda lo bonito del deporte, las amistades, porque mi vida deportiva ha sido muy dilatada. Luego, encima, vine a Albacete y seguí jugando y aquí tengo también grandes amigos.